Nueve personas asesinadas, cuatro en un bar del municipio mexiquense de Chimalhuacán, cuatro en Morelos, dos agentes de Sinaloa emboscados por un grupo armado, un policía federal secuestrado en Aguascalientes y un líder social baleado en Guerrero fue el saldo de la violencia entre la noche del sábado y ayer.

La mañana del domingo tres hombres y una mujer fueron asesinados a balazos en el bar La chica de oro, en el barrio Pescadores de Chimalhuacán; dos de los cuerpos estaban cubiertos con una manta que hacía referencia a un supuesto grupo delictivo, informó la policía municipal.

En tanto, la Fiscalía General de Morelos reportó la ejecución de cuatro hombres, dos la madrugada de ayer en el pueblo de Amilcingo, municipio de Temoac.

Uno de los homicidios fue perpetrado en Coatetelco, municipio de Miacatlán, y el otro en Jiutepec; todos eran varones de entre 30 y 50 años de edad.

En tanto, Felipe Antuna, comandante de la policía preventiva de Sinaloa, y un agente de Culiacán fueron emboscados por un comando cuando circulaban en un vehículo en el sur de la capital del estado. El mando murió y el municipal quedó herido.

La agresión fue cometida cerca de las 8:15 horas de ayer. Los agentes circulaban después de trabajar cerca del canal de riego 7, cuando un grupo armado les cerró el paso y les disparó con armas de grueso calibre en más de 100 ocasiones.

En mayo Felipe Antuna fue secuestrado en un taller mecánico en la sindicatura de El Dorado, en Culiacán.

En Aguascalientes, un elemento de la Policía Federal fue sacado de su domicilio la tarde de ayer, en la calle Almería de la colonia España, en el sur de la capital del estado, por tres sujetos que viajaban en un vehículo compacto.

El oficial está adscrito al aeropuerto internacional Jesús Terán Peredo, en la capital.

En Iguala, Guerrero, Rubén Popoca Salgado, líder del Frente Amplio de Sociedad Igualteca y Organizaciones Sociales, fue atacado a balazos en su domicilio, en el centro de la ciudad, por dos sujetos al mediodía de ayer, infomaron fuentes oficiales.

El viernes pasado, el activista acusó al alcalde, Herón Salgado Castañeda, de estar detrás del homicidio de Eleazar Vargas Lara, activista y militante del Partido de la Revolución Democrática, cometido el 5 de junio. En esa protesta pintaron en las paredes del palacio municipal la leyenda mata líderes.