Familiares y compañeros de trabajo del chofer Fabián Mundo, de 72 años, quien fue hallado muerto el 3 de junio con lesiones en cuerpo y cara dentro de un vehículo de transporte público de la ruta 13 del municipio de Villa de Álvarez, Colima, protestaron ayer frente al palacio de gobierno y la casa de gobierno –residencia oficial del gobernador Ignacio Peralta– en demanda de que se castigue a los responsables.

Los enfrentamientos entre los cárteles Jalisco Nueva generación y de Sinaloa han hecho de Colima uno de los estados más violentos de México, con 221 homicidios de enero a abril de 2017, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Una caravana de vehículos circuló por la avenida Niños Héroes y la calzada Galván de la capital de Colima, y llegó al palacio de gobierno, donde los manifestantes bajaron el ataúd de Mundo y exigieron justicia.

Ya lo habían asaltado. Debía dinero y por eso no se dejó asaltar. Ahora está en un ataúd. Tenemos que ir golpeados para que los permisionarios nos crean que fuimos asaltados, dijo el chofer Mario Alberto Anaya.

Ningún funcionario del gobierno de Colima salió a recibir a los manifestantes, quienes continuaron con el cortejo hasta la iglesia de San Francisco de Asís, donde se llevó a cabo una misa, y de ahí fueron al cementerio municipal.

En Morelos, un hombre fue asesinado la noche del lunes y la Comisión Estatal de Derechos Humanos informó que este año se han perpetrado 267 homicidios. En Tijuana, Baja California, se halló el cadáver calcinado de un varón, y en los municipios de Chihuahua, Cuauhtémoc, Chinipas y Ciudad Juárez se reportaron 12 homicidios entre lunes y martes.