Londres.

La primera ministra británica, Theresa May, destacó este jueves ante el presidente estadunidense, Donald Trump, la importancia de que ambos gobiernos compartan información de inteligencia y que la misma debe estar resguardada, luego de que la policía británica cesó de compartir información, temporalmente, con Washington sobre el atentado perpetrado en Manchester, debido a que la prensa de Estados Unidos filtró datos e imágenes de las pesquisas.

El lunes pasado un atacante suicida de origen libio se hizo estallar a la salida de un concierto de la cantante estadunidense Ariana Grande, lo que dejó 22 muertos y 59 heridos. La policía británica ha descubierto que una célula extremista planeó el ataque y ha detenido a ocho sospechosos, incluidos el padre y un hermano del agresor, quien fue identificado como Salman Abedi, de 22 años.

El gobierno británico incluso dejó de compartir información con el estadunidense durante varias horas este jueves.

La primera ministra abordó el tema de las filtraciones de los servicios de inteligencia estadunidenses con el jefe de la Casa Blanca mientras esperaban a que se tomara la foto de la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, señaló la vocera de May.

Durante el breve encuentro entre ambos gobernantes, Trump prometió una investigación sobre las filtraciones.

La BBC informó previamente que la policía de Gran Manchester dejaría de compartir información con Washington, después de que imágenes forenses del lugar del atentado aparecieron publicadas en The New York Times.

Además, medios estadunidenses publicaron el martes pasado el nombre del atacante, también antes de que lo hicieran las autoridades británicas.

Este jueves fueron arrestados otros dos sospechosos relacionados con el atentado en la Arena de Manchester, con lo que la cifra de detenidos se eleva a ocho.

Amber Rudd, ministra británica del Exterior, se quejó de que los datos compartidos con el Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos y con agencias de inteligencia fueron filtrados a la prensa estadunidense, incluso antes de que las autoridades en Reino Unido decidieran divulgarlos. Según el diario británico The Independent, Trump se dijo profundamente perturbado al saber de las filtraciones y prometió a May investigar hasta llegar al fondo del asunto, pues la premier le dijo claramente que la relación de confianza entre Estados Unidos y Gran Bretaña estaba en peligro.

Las filtraciones sobre el atentado en Manchester minan la investigación, aseguró este jueves la policía británica, según la BBC.