Implicada en el desvío de $4 mil millones
Lunes 22 de mayo de 2017, p. 31
Xalapa, Ver.
Una juez de control impuso prisión preventiva de un año a María Georgina Domínguez Colío, quien fue directora de Comunicación Social en el gobierno del priísta Javier Duarte de Ochoa (preso en Guatemala desde abril), por abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal, coalición en contra del servicio público y desvío de 4 mil millones de pesos.
La Fiscalía General del Estado (FGE) integró la carpeta 110/2017, en la cual acusa a la ex vocera de un quebranto de 100 millones de pesos durante su encargo, de 2010 a 2014. En la audiencia, la fiscalía presentó al menos nueve cajas de documentos.
La defensa de la ex vocera la encabezó su hermano Uriel Domínguez Colío, quien dijo no tener conocimiento de las imputaciones y solicitó un receso para conocer la carpeta. La juez ordenó una pausa de dos horas y media y reanudó la audiencia a las 5 horas de ayer.
A las siete, la ex funcionaria salió de la sala de juicios orales con una sudadera de capucha para evitar a los reporteros. Tres camionetas de policías ministeriales la trasladaron al penal de Pacho Viejo.
Domínguez Colío fue capturada el sábado en sus oficinas, en avenida Orizaba número 46, y llevada al penal la medianoche del domingo. La audiencia de vinculación se programó para el viernes próximo a las 17 horas.
Domínguez Colío –quien llegó después de trabajar para el ex gobernador de Quintana Roo Mario Villanueva Madrid antes de que fuera detenido– ejerció un férreo control sobre los medios para evitar críticas al gobierno de Duarte de Ochoa.
En esos días los principales diarios de Veracruz publicaban la misma noticia principal, así como fotos, encabezados y boletines favorables a Duarte. A quienes no acataban las instrucciones o criticaban a la administración estatal se les cancelaban acuerdos publicitarios.
La ex vocera clasificaba a medios y periodistas como aliados
y no aliados
, y decidía qué funcionarios del gabinete podían hacer declaraciones a la prensa. Era tal su influencia, que la llamaban vicegobernadora
.
Dejó el cargo nueve días después de que fue encontrado el cadáver del reportero Gregorio Jiménez, secuestrado y asesinado. Él fue el décimo periodista local ultimado en los primeros cuatro años de la administración duartista.
La sustituyó Alberto Silva Ramos, hoy diputado federal, quien también enfrenta investigaciones por presunto desvío de recursos públicos por medio de empresas fantasmas.
Al final del mandato de Duarte, Domínguez Colío fue nombrada presidenta de la Fundación Colosio del Partido Revolucionario Institucional, cargo que ocupaba cuando fue detenida.