El magisterio de Baja California suspendió clases este viernes, por segunda ocasión en una semana, en mil planteles de los cinco municipios de la entidad para exigir la jubilación inmediata de 3 mil 200 profesores y trabajadores de la educación que cumplieron 30 años de servicio y cotización a la seguridad social.

La deuda del gobierno de Francisco Vega de Lamadrid asciende a mil 100 millones de pesos, para que la nómina de los profesores sea cubierta por el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Gobierno y Municipios del Estado de Baja California (Issstecali).

Tras el paro laboral, integrantes de la sección 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación distribuyeron volantes informativos a conductores de vehículos y peatones en los principales cruceros de las ciudades del estado.

La dirigente magisterial María Luisa Gutiérrez Santoyo detalló que, además de la deuda con Issstecali, había un débito de 85 millones de pesos, el cual se entregó este viernes a maestros interinos que tenían tres meses sin cobrar, y otro pago pendiente de 25 millones de pesos del aguinaldo de 2016.

Gutiérrez Santoyo aseveró que los paros laborales no tienen el propósito de obtener aumento salarial, un bono o alguna prestación, sino lograr el pago quincenal a maestros interinos, porque resulta una burla que tarden tres meses en entregarles su sueldo. Asimismo, buscan que el gobierno estatal defina una ruta para las jubilaciones.

Agregó que las movilizaciones se mantendrán hasta que el gobierno de Vega cumpla los pagos pendientes, lo que ha provocado protestas de maestros a partir del 30 de abril.

También protestan en Guerrero

Alrededor de mil 200 profesores recién jubilados denunciaron que no han recibido estímulos prometidos y otros pagos ofrecidos por la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), tras aceptar su retiro.

Señalaron que pese a los adeudos con miles de jubilados y pensionados, la SEG publicó una nueva convocatoria en diciembre pasado para profesores que deseen jubilarse este 2017, y también ofreció un estímulo económico.

En representación de los inconformes, Guadalupe Eugenia Feliciano exigió al gobernador Héctor Astudillo Flores respuesta a su demanda, entregada el 7 de febrero, en la que solicitan el pago del estímulo a la jubilación.