La joven raquetbolista mexicana sucumbió ante la experimentada Rhonda Rajsich
Me siento triste y molesta conmigo y por fallarle a México, pero me voy a levantar pronto
Domingo 16 de abril de 2017, p. a15
San José.
Dos años tenía la mexicana Paola Longoria de no conocer una derrota y la sufrió frente a una experimentada rival que le arrebató la corona del Panamericano de Raquetbol y la racha de 188 triunfos consecutivos: Rhonda Rajsich, de Estados Unidos.
Una hora y media duró el intenso juego entre la número uno mundial y la que alguna vez ocupó esa posición de honor. La balanza se inclinó hacia Rajsich para ganar la final individual, tras remontar un adverso primer set 15-7 y sellar la victoria en 13-15 y 9-11, en muerte súbita.
Así, Longoria cedió la corona que buscaba repetir por tercer año consecutivo y no fue lo único, porque también perdió el invicto de 188 victorias seguidas, de las cuales 183 pertenecen al tour profesional y cinco del certamen continental, en el San José Indoor Club.
Paola ganó el primer set con autoridad, sin embargo, para el siguiente la estadunidense comenzó a darle pelea y se vio favorecida por los errores cometidos de la mexicana, quien se esforzaba por mostrar ese ataque feroz que la distingue.
Pese a la desventaja y con la estadunidense que estaba a un punto para llevarse el segundo set, la potosina no dejó de luchar, recuperó seis unidades y dejó el marcador 13-14, luego vendría Rajsich con dos tiros y cerrar 15-13 empatando el juego (1-1) y forzar el tercero.
El desenlace a muerte súbita con la primera que llegue a los 11 puntos fue de altibajos entre las dos y con polémica. Paola protestó por una bola que había pegado en la línea cuando iban (5-6). El partido se detuvo 10 minutos para la revisión de la jugada.
Las acciones continuaron y ambas estaban igualadas 7-7 y después 9-9. Dos yerros de Paola le dieron el triunfo a Rajsich, quien se bañó de oro para dejar a Paola con la plata, ya que el bronce quedó en poder de Samantha Salas, también de México.
Paola Longoria no ocultó su frustración. Me siento triste y molesta conmigo, porque la derrota la ocasioné yo, por fallar puntos claves. Me duele fallarle a México, pero de esto se aprende y sé que me voy a levantar pronto
.