Novena edición del Carnaval de Tradiciones que organiza el museo
Hoy concluyen las actividades que organiza el recinto de Xochimilco
Domingo 16 de abril de 2017, p. 5
Con la finalidad de recuperar los festejos populares relativos a la Semana Santa, el Museo Dolores Olmedo realizó ayer la tradicional quema de Judas, a la que asistieron más de 3 mil 340 personas, quienes presenciaron cómo los muñecos de cartón y carrizo que representan al mal estallaron en millares de piezas.
La quema de judas, que forma parte de la novena edición del Carnaval de Tradiciones, organizado por el museo, es una actividad que data de la época de la Colonia, y surgió para evangelizar a los indígenas, porque representaba el triunfo del bien sobre el mal, por eso la figura comúnmente era un diablo, aunque desde hace varios años también son muñecos de personajes populares.
Esta tradición sigue vigente en el Museo Dolores Olmedo, donde los muñecos de cartón, encohetados y pintados de diversos colores que personifican la maldad humana, son elaborados por artesanos de Tultepec, estado de México.
Josefina García Hernández, directora de la colección y servicios educativos del Dolores Olmedo, explicó que desde hace nueve años se realiza el Carnaval de Tradiciones, cuyo espectáculo central es la quema de judas, porque se ha perdido esta tradición en años recientes, debido a los riesgos que implica el uso de pirotecnia.
La actividad central del Carnaval se inició a las 13 horas. Las primeras detonaciones fueron las de una serie de letras que decía Bienvenidos
; enseguida, dos enormes calacas y cuatro hombres con máscaras de demonio danzaban a ritmo de tambora por uno de los pasillos del museo que alberga la ex Hacienda de la Noria, en Xochimilco.
En el jardín, donde fue colocado el castillo que también se quemaría, se encontraban los toritos, cuyos cohetes detonaban mientras bailaban.
La gente se emocionó cuando se escuchó la marcha fúnebre y desfilaron los demonios y las calacas, que cargaban a un enorme muñeco pintado de danzante. Se trataba de la primera figura que ardería.
Después de la explosión del danzante, una de las torres del castillo se iluminó y una enorme rueda de color azul se quemaba mientras una pequeña figura de payaso realizaba acrobacias en un trapecio; todos los niños aplaudieron al ver al diminuto personaje.
El espectáculo continuó de la misma forma con el resto de los muñecos que representaban a danzantes mexicanos.
Coloridas explosiones
Alrededor de las 14 horas, miles de personas que se encontraban en los jardines del museo fueron testigos de la explosión de la figura del enorme judas rojizo que giraba en el cielo.
Cuando todo parecía haber terminado, comenzaron las detonaciones de unas bombas que iluminaron parte de jardín, mientras volaban serpentinas de colores. La fuerte explosión de los cohetes hizo que varios niños y adultos se taparan los oídos. Al final todos aplaudieron y entre el bullicio se escuchó un ¡Viva Xochimilco!
El Carnaval de Tradiciones, que concluye hoy, incluyó también la escenificación de la obra Los niños del maíz, a cargo de la compañía Claroscuro, sobre la creación del hombre, según el Popul Vuh, y la presentación del ballet folclórico Ita-Andehui, dirigido por Alejandro Chavarría.
La programación del carnaval se complementó con una feria artesanal y gastronómica, y con la presentación del tradicional Altar de Dolores, que el público podrá visitar hasta el 7 de mayo en el recinto que se ubica en avenida México 5843, La Noria, en Xochimilco.