Efectúan en el Politécnico investigación en ratones machos
Viernes 14 de abril de 2017, p. 2
La radiación no ionizante emitida por la televisión, ondas de radio y dispositivos móviles incrementa la predisposición a padecer alto grado de ansiedad, depresión e infertilidad, determinaron científicos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en un estudio con ratones machos.
La egresada Mayra Yoselim Granados Martínez y la investigadora Norma Paniagua Castro, de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), unidad Zacatenco, afirmaron que esta investigación demostró que la exposición a campos magnéticos de 860 megahercios (MHz) a 0.5 vatios de potencia ocasiona estas alteraciones siquiátricas.
Granados Martínez explicó que un lote de ocho ratones machos estuvo expuesto a radiación a 860 MHz cuatro horas diarias, 35 días consecutivos, lo que representa un ciclo espermático, en diferentes estaciones del año (verano e invierno) en dos años, mientras otro grupo fue sometido sólo 15 días. En ambos grupos se realizaron pruebas de actividad motora, ansiedad y depresión.
La medición de la ansiedad en los roedores reveló que los animales irradiados en junio sufrieron un incremento de ese trastorno y los de invierno no se vieron afectados.
Respecto de la depresión, se llevó a cabo la prueba de nado forzado por cinco minutos, en la que se evaluó el tiempo de nado, de escalamiento y de inmovilidad; en ésta los roedores radiados en verano también presentaron altos niveles del padecimiento, no así los de invierno.
Entre más horas estemos expuestos a la radiación más predisposición tenemos a tener estas dos alteraciones sicológicas. Estamos sometidos a ondas las 24 horas de los 365 días del año, no las vemos, pero ahí están afectando
, señaló la investigadora politécnica.
El estudio de infertilidad, en el que se irradió a ratones por cuatro horas diarias, 35 días consecutivos, registró una disminución de la cuenta espermática, en la movilidad y la viabilidad, incluso se encontraron alteraciones en la morfología de los espermatozoides.
Granados Martínez subrayó que en México no se aplican límites de radiaciones en comparación con Europa. Agregó que es necesario divulgar los posibles efectos biológicos. El interés científico por realizar trabajos que llevan a determinar que los campos eléctricos pudieran tener un daño en los seres humanos es relativamente reciente; por ello, se pretende que en un futuro próximo se puedan tener normas que regulen la exposición a esos rayos
.