La exposición De la inmovilidad, de Eloy Tarcisio (CDMX, 1955), montada en la Galería Machado Arte Espacio, reúne la obra más reciente del pintor e instalacionista.

Respecto de la actualidad del arte, en entrevista con La Jornada, explica: “ocurre que el arte pasa por un proceso muy extraño en el que visto desde el contexto de la vertiente contemporánea está desdibujado. Pasamos por un momento poshistórico en que el arte desde una perspectiva convencional ya se mató y lo que pretenden es que éste sea transformado.

“El arte contemporáneo está tan desdibujado como el llamado arte convencional porque ocupa el mismo lugar, es decir, el escaparate –galerías, museos, ferias, bienales– es el mismo.”

No obstante, “se intenta hacer creer que el arte actual, desde el punto de vista del escaparate, es otro y que ya no hay lugar para el arte anterior. No se dan cuenta de que la muerte del arte es un símbolo nada más y que éste sigue adelante. Los artistas determinan qué es el arte. Sin embargo, se han ido con la idea de que es arte lo que determinan unos muy pocos artistas. Eso ha generado gran confusión al grado de que las instituciones tienen la misma idea del arte que las galerías, o el mainstream (corriente dominante).

“No perciben –prosigue– que el arte está en un contexto hacia el que no han volteado la mirada y que lo más interesante de los artistas de mi generación apenas lo hacemos ahora. Vamos, no nos repetimos, sino redefinimos lo que es nuestra visión del mundo.

Las instituciones, al igual que la tendencia dominante, ya están repetidas. Son ejercicios escolares, obras mínimas que tratan de hacer valer cuando ya son una imitación de la imitación.

Perspectiva poética de la muerte

A Eloy Tarcisio le consta que el arte contemporáneo en los escaparates es algo que se repite desde los años 70 del siglo pasado, porque él se formó en esa época. “Hice instalación, environment, performance, toda esa serie de cosas que llaman lo contemporáneo. Claro, el beneficio del mainstream es tener mercado. Es decir, el arte ubicado en el mercado tiene grandes pretensiones comerciales.

El arte verdadero o que de alguna manera tiene un poco más de sentido es aquel que tiene un compromiso mayor con la sociedad, que se vuelve antisistémico. En algún momento el arte que han dejado de ver es el que ahora tiene nueva postura frente a los sistemas del arte contemporáneo.

De la inmovilidad gira en torno de un tema reiterativo en el trabajo de Eloy Tarcisio: la muerte, no desde un punto de vista traumático, de desollados, desmembrados, cosa que ya he hecho, sino desde uno más poético.

Trae a colación De la movilidad y la inmovilidad de Douve (1953), del poeta francés Ives Bonnefoy, libro que leyó a finales de los años 70 del siglo pasado, en el que se habla de la muerte.

La exposición De la inmovilidad, de Eloy Tarcisio, concluye el 15 de abril en la Galería Machado Arte Espacio (Oklahoma 127, colonia Nápoles).