La Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina sigue al menos cuatro líneas de investigación para determinar qué originó el derrumbe del estacionamiento de una plaza comercial en construcción, en la colonia Olivar de los Padres, que dejó saldo de siete personas muertas y diez heridas. Las indagatorias van desde un posible error humano hasta anomalías en el otorgamiento de los permisos de construcción.

El subprocurador de averiguaciones previas desconcentradas de la dependencia, Óscar Montes de Oca, dijo que es prematuro determinar cuáles fueron las causas; no obstante, señaló que hay muchas variantes: “una es que la grúa pudo haber caído con la estructura y ello provocar el derrumbe.

Otra, defectos de la misma estructura o un error en el proceso constructivo. O que el encargado no dio el mensaje al operador de la grúa, pero habrá que revisar las licencias de construcción, ya que hay casos en que se autorizan tres niveles y se hacen cuatro. Puede darse una situación así, agregó el funcionario.

Manifestó que serán los peritos en seguridad, arquitectura, ingeniera y criminalística quienes determinen lo que ocurrió, pero habrá que esperar a que la Secretaría de Protección Civil determine las condiciones de estabilidad de la zona, para que los especialistas puedan entrar otra vez y confirmar los peritajes.

Ayer, seis de las siete personas que murieron fueron identificados por sus familiares. Sólo uno permanece en el anfiteatro de la delegación Álvaro Obregón en espera de que sea reclamado.

Sobre los lesionados, se informó que tres reciben atención en el Hospital de Traumatología y Ortopedia del Instituto Mexicano del Seguro Social; mientras los otros seis permanecen en la Cruz Roja de Polanco.

El agente del Ministerio Público solicitó a los nosocomios los expedientes clínicos relacionados con las lesiones para ampliar la información de los hechos y conocer el estado de salud de los heridos.

Asimismo, el subprocurador Montes de Oca subrayó que ya fueron presentados a declarar un responsable de obra, el operador de la grúa, dos policías, un médico y testigos de los hechos.

Respecto de las primeras versiones de la causa del colapso, precisó que hasta el momento el operador de la grúa no ha reconocido que por las maniobras una trabe chocó y sobrevino el derrumbe, pues refirió que la tenía suspendida y de repente escuchó el estruendo.