La Semana Santa comenzó ayer con la bendición de palmas por el nuncio apostólico en México, Franco Coppola, quien llamó a la población a mantener la fe, pese a las dificultades.

En la celebración del Domingo de Ramos, en la delegación Iztapalapa, con una asistencia de 40 mil personas y saldo blanco, recibió de la gente una corona de espinas y participó en una procesión con los actores que intervienen en la 174 representación de la Pasión de Cristo.

Después se dirigió al Santuario del Señor de la Cuevita para oficiar una misa, antes de la cual recordó que ayer en todo el mundo fue un día particular, dedicado como jornada mundial a la juventud y aquí hay muchos jóvenes. El papa Francisco invitó a todos los jóvenes a celebrar ese día.

Con el propósito de garantizar la seguridad de 2 millones de personas que acudirán a los actos de la representación, la delegación informó que se contará con la presencia 10 mil uniformados en acciones preventivas y apoyo a la circulación, así como para evitar la comisión de delitos.

Pese a que no se habrá ley seca, se aplicará un operativo para retirar locales irregulares de venta de bebidas alcohólicas en la vía pública, precisaron funcionarios, tras inaugurar tres exposiciones artísticas sobre la historia de esta representación.