Aumentó 35% respecto de un año anterior, cuando fueron 80 millones en el orbe
Altos precios de alimentos, conflictos sociales y fenómenos climáticos extremos, las causas, indica un estudio de la ONU y la UE
Se prevé que la cifra se incremente por crisis en África
Sábado 1º de abril de 2017, p. 30
Roma.
La combinación de precios récord, conflictos y condiciones climáticas extremas propició que aumentara a 108 millones el número de personas afectadas por el hambre en el mundo durante 2016, según un informe elaborado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Unión Europea (UE).
Ese total representa un incremento de 35 por ciento de personas enfrentadas a una inseguridad alimentaria grave
, cuya cifra era estimada en 80 millones en 2015.
La denominación se refiere a las personas que sufren ya malnutrición aguda y que no tienen los medios para cubrir sus necesidades energéticas de manera durable, como puede ser el caso de las familias obligadas a matar su ganado para sobrevivir.
Esta inseguridad alimentaria puede agravarse aun más este año, en la medida en que el hambre amenaza directamente cuatro países: Sudán del Sur, Somalia, Yemen y el noreste de Nigeria.
El informe, publicado el viernes, que se basa en varias metodologías de medición, es resultado de una colaboración entre la UE, varias agencias de la ONU, la agencia estadunidense Usaid y varios organismos especializados regionales.
Entre las condiciones meteorológicas estudiadas figuran principalmente las sequías y lluvias irregulares causadas por el fenómeno El Niño. Pero en nueve de 10 crisis humanas del año anterior, el mayor factor causante del hambre fue un conflicto civil.
Además de las regiones amenazadas por el hambre, países como Irak, Siria (así como refugiados de esta nacionalidad en los países vecinos), Malawi y Zimbabue conocieron una generalización de la inseguridad alimentaria.
Podemos impedir que gente muera
por esa causa, reiteró José Graziano da Silva, director general de la FAO (agricultura y alimentación), quien llamó a intensificar los esfuerzos para salvar, proteger e invertir en medios de existencia rurales
.
No se trata sólo de un asunto humanitario. El hambre exacerba las crisis, causando más inestabilidad e inseguridad. Lo que aparece hoy como un desafío ligado a la seguridad alimentaria se vuelve después un desafío relativo a la seguridad
, advirtió Ertharin Cousin, directora del Programa alimentario mundial.
Es una carrera contrarreloj; el mundo debe actuar ahora para salvar las vidas y los medios de existencia de millones de personas
, indicó.