La madrugada de ayer cuatro personas, de entre 25 y 30 años, murieron y una más resultó lesionada al impactar su vehículo contra un poste en Paseo de la Reforma y la calle de Lieja, en la colonia Juárez, delegación Cuauhtémoc.

De acuerdo con los primeros reportes de policías de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México, cerca de las 3:50 horas de la madrugada, el automóvil BMW, color blanco, era conducido a exceso de velocidad.

Las autoridades calculan que los jóvenes viajaban entre 160 y 200 kilómetros por hora, lo cual originó que el conductor, quien presuntamente iba en estado de ebriedad, se impactará y sus acompañantes (dos hombres y dos mujeres) salieran disparados.

El auto quedó partido a la mitad sobre el camellón de la referida avenida, justo frente a la torre de BBVA Bancomer. Los cuerpos de las víctimas quedaron tendidos, una mujer resultó decapitada durante el impacto.

Los servicios de emergencia acudieron al sitio, pero al verificar el estado que presentaban los cadáveres se retiraron.

En un principio indicaron que no había sobrevivientes. Sin embargo, los rescatistas se percataron que algo se movía en la parte izquierda del vehículo y descubrieron al conductor, quien quedó atrapado en su asiento entre las bolsas de aire, por lo que llamaron a los paramédicos.

El chofer, de 33 años, recibió los primeros auxilios y de inmediato fue trasladado en una ambulancia a la Cruz Roja de Polanco, donde desde ayer se encuentra bajo custodia de la Policía de Investigación en calidad de detenido.

Policías del sector Ángel-Zona Rosa, que llegaron al punto del percance, acordonaron la zona y dieron aviso a la Coordinación Territorial de Cuauhtémoc 5 para realizar las primeras diligencias.

La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México informó que el Ministerio Público comenzó la carpeta de investigación por el delito de homicidio por hechos de tránsito vehicular y que el conductor del BMW podría enfrentar cargos por la muerte de las cuatros personas que lo acompañaban y perdieron la vida.

Los cadáveres fueron retirados y trasladados por peritos de la procuraduría capitalina al anfiteatro de la Fiscalía de Cuauhtémoc y, posteriormente, fueron llevados al Instituto de Ciencias Forenses (Incifo) para realizar la necropsia de ley.

Sus familiares deberán acudir al Incifo para hacer el reconocimiento y reclamar los cuerpos.