La Cámara de Diputados guardó ayer un minuto de silencio en memoria de Emma Gabriela Molina Canto, asesinada el lunes en Yucatán y quien disputó la custodia legal de sus hijos con Martín Alberto Medina Sonda, acusado de lavado de dinero en la administración del ex gobernador de Tabasco Andrés Granier Melo.

Desde su curul, el vicecoordinador del Partido Revolucionario Institucional, Jorge Carlos Ramírez Marín, expuso: “Los que tuvimos el gusto de conocerla, los que sabemos las razones que llevaron a su muerte, los que sabemos lo poco que hacemos por las mujeres, queremos simplemente pedir a esta cámara un minuto de silencio en su memoria.

Pedimos que el crimen no quede impune. El gobierno de Yucatán tiene ya dos detenidos. Queremos que se llegue hasta las últimas consecuencias, expresó.

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) también condenó el homicidio y exigió a las autoridades del estado medidas cautelares para proteger a la familia de la víctima.

Recordó que el 31 de octubre de 2014 emitió la recomendación 54/2014, en la cual se acreditaron diversas violaciones a las garantías de Molina Canto, su madre y sus hijos, particularmente las de acceso a la justicia, trato digno y derecho de las mujeres a vivir sin violencia. Sin embargo, las autoridades no la han atendido.

A su vez, el Instituto Nacional de las Mujeres condenó de manera enérgica el atroz feminicidio de Molina Canto, y expresó su confianza en que las autoridades estatales habrán de investigar este crimen de manera imparcial y expedita, aplicando la ley y los protocolos que garanticen el acceso pleno a la justicia y la reparación y protección efectiva a las víctimas, con estricto respeto de los derechos humanos.

De igual manera, manifestó su rechazo a cualquier forma de violencia contra las mujeres y expresó sus condolencias a familiares y amigos de la víctima.

Católicas por el Derecho a Decidir también condenó el hecho y exigió que no haya impunidad.