El Proyecto Mesoamérica y las alianzas público-privadas, los temas centrales
Martes 21 de marzo de 2017, p. 13
Se tiene confirmada hasta ahora la participación del presidente Enrique Peña Nieto en la 16 Cumbre de Tuxtla los días 28 y 29 de este mes en Costa Rica.
De realizarse, sería este el primer viaje del mandatario al exterior en 2017, pues el 24 de enero canceló su asistencia a la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en República Dominicana y días después anunció públicamente que no atendería en febrero la invitación de Donald Trump a la Casa Blanca.
El país anfitrión espera la participación de los 10 jefes de Estado que conforman este mecanismo de cooperación regional. El encuentro fue convocado con el lema Mesoamérica nos une
.
Se ha informado que los temas de mayor relieve que se discutirán son el potencial de las alianzas público-privadas y el Proyecto Mesoamérica.
Este último sustituyó al llamado Plan Puebla Panamá y a la fecha ha logrado concretar 62 operaciones de diverso tipo con una inversión de 612 millones de dólares, y hay 45 más en ejecución por 2 mil 464 millones de dólares. Además, el Fondo Yucatán ha otorgado 83.4 millones de dólares para proyectos carreteros y fronterizos en Belice, Costa Rica, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Panamá.
Asimismo, la información de contexto para la cumbre consigna que entre enero de 2008 y julio de 2015 se realizaron 107 operaciones financieras con valor de 3 mil 77 millones de dólares.
En la agenda mexicana, el interés para esta cumbre está centrado en el programa Mesoamérica sin Hambre, así como en el gasoducto de México a Guatemala, El Salvador y Honduras. Este último consiste en una línea de distribución de gas que partirá de Salina Cruz, Oaxaca, hasta el departamento de Escuintla, Guatemala.
El proyecto tiene una longitud de 630 kilómetros, de los cuales 420 se construirían en territorio mexicano, a un costo de 363 millones de dólares, y 180 kilómetros en suelo guatemalteco, con una inversión de 162 millones de dólares. Se estima que será concluido en tres a cuatro años
Hay tal expectativa en este ducto que, según expertos, el mismo podría servir para exportar el gas natural de Estados Unidos a Centroamérica y, eventualmente, a regiones de Europa y Brasil.
Esto, a partir del plan mexicano de importar, por el sistema Los Ramones, 2 mil 500 millones de pies cúbicos desde Estados Unidos hasta el centro del país, donde existe interconexión con las regiones petroleras del sur, y de ahí la factibilidad de exportarlo, con el nuevo gasoducto a Centroamérica, a las naciones del Triángulo del Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) y a otras latitudes si el proyecto se extiende hasta el canal de Nicaragua
, añade la información.