Madrid.

La Liga española ya parece sólo cosa de dos, Real Madrid y Barcelona, después de que el Sevilla se descolgara hoy tras perder por 3-1 ante un Atlético de Madrid que revitalizó sus opciones de pelear la tercera posición.

La jornada 28 se cerró con el cómodo triunfo 4-2 del Barcelona ante el Valencia, que dio enormes facilidades. De tal forma que el conjunto azulgrana se mantuvo a dos puntos del Real Madrid, aunque los blancos todavía deben recuperar un encuentro aplazado ante el Celta de Vigo.

A ocho puntos del líder y a seis del Barcelona se quedó el Sevilla con su estrepitoso fracaso en el Vicente Calderón. El equipo de Jorge Sampaoli se hundió en las fechas recientes y apenas sacó dos empates y una derrota en tres jornadas.

El Real Madrid ganó el sábado 2-1 en el difícil campo del Athletic de Bilbao y obligó al Barcelona a vencer al Valencia. Lo hizo sin alardes y con dos nuevos goles de Lionel Messi, que ya lleva 25 en esta edición de la Liga española.

El equipo ha hecho un buen partido y hemos controlado. Estamos contentos, declaró Andrés Iniesta.

El Valencia dibujó un espejismo a los 29 minutos al adelantarse con un saque de esquina en el que Mangala remató libre de marca. Pero seis minutos después empató el Barcelona en un gol imposible. Con un simple saque de banda, Neymar dejó solo a Luis Suárez en un mano a mano que resolvió ante Diego Alves a los 35 minutos. El central argentino Ezequiel Garay no atendió a la marca y lo pagó.

También fue grosero el error individual en el segundo gol del Barcelona. Llegó a los 45 minutos con un tremendo despiste de Mangala, quien después derribó a Suárez en el área. Fue penal, expulsión del defensor y gol de Messi.

Todavía faltaba otro error defensivo. Esta vez lo protagonizó el Barcelona, que dejó un enorme agujero que aprovechó el ex azulgrana Munir para definir justo antes del descanso. Así concluyó una primera parte de locura.

El Barcelona inició la segunda mitad con ganas de resolver el partido y a los 53 minutos marcó el tercer gol, obra de Messi. Y a dos minutos del final llegó el tanto de André Gomes, quien no lo celebró después de ser silbado por la que fue su hinchada la temporada pasada. Así resolvió el Barcelona un triunfo casi rutinario.

En otro encuentro, Atlético de Madrid recuperó su versión más reconocible para vencer con toda justicia por 3-1 a un Sevilla en caída libre. Diego Godín adelantó al equipo local a los 37 minutos y en la segunda mitad el Atlético sentenció con un tiro magistral de Antoine Griezmann y cerró con un tanto de Koke. El Sevilla maquilló el resultado con un gol de Joaquín Correa en los minutos finales.

En Gijón, el portero mexicano Guillermo Ochoa detuvo un penal disparado por Traoré, pero no pudo evitar otra derrota del Granada, que cayó 3-1 ante el Sporting Gijón. Ingason marcó el gol para los nazaríes al minuto 51, pero la respuesta local llegó nueve minutos después y Traoré puso el empate. El Sporting dio la voltereta al 63 con un cabezazo de Babin, y al 66 Carlos Carmona sentenció el 3-1.