La inteligencia artificial (IA) es una de las revoluciones tecnológicas que más impacto tienen en el mundo, pero México se está quedando atrás cuando debería ser actor y no un simple observador de estos cambios, aseveró Luis Enrique Sucar Succar, investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica.

Para que el país se vuelva protagonista en este campo se necesitan llevar a cabo transformaciones, principalmente en su sistema educativo y de investigación, pues actualmente no contamos con centros públicos de investigación que puedan generar la masa crítica para desarrollar proyectos, señaló.

El ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2016 participó en el seminario Inteligencia artificial y el futuro de México, organizado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia y el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, que se realizó la noche del miércoles.

Tenemos grupos pequeños de investigación, no contamos con una masa crítica, no se identifican grupos fuertes en alguna área específica. Los dos sistemas más grandes de investigación, el Conacyt y la UNAM, no cuentan con un centro dedicado a la inteligencia artificial, es algo paradójico en esta época, lamentó.

“Entre los sectores prioritarios de la inteligencia artificial que se podrían explotar en México se encuentran el procesamiento de voz y texto en español –hay muchos recursos en inglés pero pocos en nuestra lengua–; en el área de educación con tutores inteligentes que dieran capacitación y ofrecieran laboratorios virtuales; en el área de visión computacional se podrían desarrollar aplicaciones médicas y de seguridad; en la robótica con autómatas de servicios y vehículos autónomos, entre otros.”

Por su parte, Guruduth S. Banavar, vicepresidente de Investigación y director de Ciencia para Cómputo Cognitivo de IBM-Nueva York, señaló inteligencia artificial se utilizará en el trabajo diario, en la toma de decisiones y mejorará la efectividad en muchos procesos cotidianos.

Planteó que en un futuro no muy lejano trabajarán de manera conjunta la inteligencia humana y la artificial. Por ejemplo, dijo, habrá máquinas que puedan asesorar a un médico para atender problemas de cáncer

Estamos hablando de un asistente cognitivo, una máquina que nos ayudará a realizar nuestro trabajo, dando mejores opciones; ese es el futuro que estamos tratando de crear con la inteligencia artificial en las computadoras, esta combinación de lo humano y de la máquina es muy importante. Los humanos tienen sentido común para la toma de decisiones creativas e intuitivas, mientras que las máquinas son buenas para hacer análisis y descubrimientos de grandes cantidades de datos.