Washington.

El gobierno del presidente estadunidense Donald Trump dio más libertad al Pentágono y a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para llevar a cabo ataques de drones contra objetivos extremistas en Medio Oriente, informó este martes la prensa estadunidense.

Esta política es opuesta a la del ex presidente Barack Obama, que establecía que los ataques con drones debían ser aprobados en un proceso intergubernamental en Washington.

El diario Wall Street Journal señaló que “el presidente Donald Trump otorgó a la CIA, en secreto, nuevos poderes para llevar a cabo ataques con drones contra sospechosos de terrorismo”.

Esta extensión de poderes fue puesta en práctica por primera vez a finales de febrero en un bombardeo contra el número dos de Al Qaeda en Siria, Abu Jeir al Masri, indica el diario, que cita a funcionarios estadunidenses no identificados.

La administración Trump también dio luz verde al Pentágono para llevar a cabo ataques con drones u operaciones de comandos en Yemen sin pedir autorización a la Casa Blanca, indicó el lunes The New York Times. El diario agregó que Trump aprobará la misma medida para Somalia.

La administración Obama multiplicó los ataques con drones contra los yihadistas en Medio Oriente, y estableció un marco para tratar de evitar abusos y víctimas civiles.

En estos ataques han muerto al menos 2 mil 581 combatientes y entre 64 y 116 civiles desde 2009, de acuerdo con un balance hecho público por la administración Obama, referente sólo a los países que no son considerados zona de guerra por Estados Unidos. Varias ONG consideran que este balance está lejos de la realidad.

En tanto, trascendió que Rex Tillerson, secretario de Estado, mientras se desempeñaba como jefe de la petrolera ExxonMobil –al menos entre 2008 y 2015–, utilizó una dirección de correo electrónica alternativa con el seudónimo de Wayne Tracker (Wayne es su segundo nombre) para cuestiones relacionadas con el cambio climático, entre otras cosas.

La información se desprende de documentos judiciales del fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman. La Fiscalía General investiga si en los últimos años ExxonMobil ocultó al público hallazgos importantes sobre los peligros de dicho fenómeno.

Para su investigación Schneiderman usó gran cantidad de datos financieros, correos electrónicos y otros papeles de la petrolera, que aportó 673 documentos. Según el fiscal, la empresa no informó sobre el correo electrónico alternativo de Tillerson. Los correos tampoco figuraban en los registros.

Por último, el vocero de la casa Blanca, Sean Spicer, aseveró que Trump está muy confiado en que va a ser reivindicado en su denuncia de que Obama ordenó espiarlo cuando era candidato republicano durante la campaña electoral de 2016, debido a evidencias halladas por el Departamento de Justicia que apoyan las acusaciones del magnate.

En otro orden, Trump tuvo ingresos superiores a 150 millones de dólares en 2005 y pagó 38 millones de dólares en impuestos ese año, informó la Casa Blanca. Esto se dio a conocer luego de que la conductora de MSNBC Rachel Maddow anunció que tenía parte de las declaraciones fiscales de Trump de 2005 y se alistaba a difundir su contenido ante las cámaras la noche de este martes.