La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) puede comenzar de manera secreta antes de junio, plazo anunciado por los gobiernos de México y Estados Unidos, aseveró Luis Enrique Zavala Gallegos, vicepresidente de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (Anierm).

Así ocurrió, subrayó, cuando en 1994 comenzó a negociarse dicho tratado. Algo similar sucedió con el fallido Acuerdo de Asociación Transpacífico, apuntó, cuyas pláticas fueron dadas a conocer cuando prácticamente habían concluido.

Es muy probable que cuando se oficialice la renegociación del TLCAN, en muchos temas, como servicios, hidrocarburos, telecomunicaciones, logística y áreas en que Estados Unidos es verdaderamente superavitario no sólo con México sino a escala mundial, ya haya acuerdos previos, señaló en entrevista.

Consideró que los asesores del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya le están haciendo ver las fortalezas que mantiene su país con el tratado, además de que no querrá perder acceso a la riqueza petrolera de México, que se abrió con la reforma energética, ni al superávit que mantiene en servicios como telecomunicaciones o financieros, que supera al que tiene este país en mercancías.

Estados Unidos sabe que México es importante para ellos; si no, hubiera tomado medidas de cancelación inmediatamente, indicó.

Frente a la postura de otros grupos empresariales de que el país debe fortalecer el mercado interno, Luis Enrique Zavala sostuvo que no hay condiciones para hacerlo, porque además de que está muy debilitado y de la gran dependencia hacia Estados Unidos, predomina la informalidad y se carece de una política industrial.

Resulta imposible diversificar las exportaciones cuando toda nuestra infraestructura y plataformas de comercio exterior están orientadas hacia Estados Unidos. Es preocupante soñar que sin una política industrial se puede fortalecer el mercado interno de manera inmediata. Lo más probable es que el próximo gobierno va a recibir una gran cantidad de problemas por esta falta de previsión de los asesores neoliberales, quienes creyeron que el TLCAN era inamovible y jamás pensaron que el supuesto gran beneficiario, Estados Unidos, lo impugnara o cuestionara, declaró.

La Anierm, dijo, propone que México pugne por el multilateralismo, pero no bajo el modelo económico neoliberal, que ya está agotado, sino por la apertura comercial basada en mayor equidad e integración entre naciones, así como el respeto a la participación del Estado en la industria.

Casi dos meses después de que Donald Trump tomó posesión como presidente, hasta el momento no se ha notado una reducción de las exportaciones. Incluso Zavala previó que no se notarán efectos al respecto en lo que resta del sexenio, sino hasta después de 2018. Lo mismo sucederá con los resultados de la renegociación del TLCAN.

Por el momento los datos sobre comercio exterior siguen siendo positivos, aseguró, y lo atribuyó principalmente a la recuperación de la economía estadunidense, ya que por modesta que sea jala a México.