El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray Caso, dijo esperar que las pláticas formales con Estados Unidos para renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) se inicien en junio o julio, y que a finales de año se concreten acuerdos, lo cual no coincide con el calendario del secretario de Comercio del país del norte, Wilbur Ross, quien estimó que el diálogo real comenzaría en la última parte de 2017.

Luego de reunirse en Washington con el asesor de Seguridad Interior, Herbert Raymond McMaster; el asesor senior del presidente Donald Trump, Jared Kuschner, y el director del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, Gary Cohn, y con base en lo dialogado con ellos, explicó que las pláticas sobre el TLCAN se iniciarán una vez que concluya el proceso de auscultación que realiza la Secretaría de Economía en México y el trámite de consulta legislativa que tendrá que efectuar el gobierno estadunidense. Previó que ello ocurrirá a mediados de año.

En conferencia de prensa en Washington, el canciller ratificó el rechazo de Los Pinos a que nacionales de otros países sean deportados a México. Las decisiones sobre quién entra al país las toma México y sólo México, enfatizó.

Acompañado por el embajador de México, Gerónimo Gutiérrez, manifestó su preocupación por la pretensión del gobierno de Trump de separar familias de migrantes a su entrada a Estados Unidos.

Resaltó que el gobierno mexicano está dispuesto a llegar a buenos acuerdos y tener un diálogo constructivo con la Casa Blanca, siempre y cuando se respeten los derechos humanos de los connacionales. Separar padres e hijos, con independencia de las razones que motivan políticas de esa naturaleza, representa atentar contra la familia, subrayó.

Por tercera vez desde la toma de posesión de Trump como presidente de Estados Unidos, en enero, Videgaray volvió a reunirse con funcionarios de Washington vinculados a las áreas de economía, comercio y seguridad interior.

Además del titular de la SRE, también estuvo en esa ciudad el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, quien tenía previsto reunirse con su homólogo.

La visita de los funcionarios se da cuando las relaciones entre México y Estados Unidos pasan por momentos de incertidumbre, por los planes de Trump de levantar un muro en la frontera, expulsar a inmigrantes indocumentados y renegociar el TLCAN.

En la embajada de México, Videgaray respondió con un no rotundo a la pregunta de si el gobierno de Enrique Peña Nieto estaría dispuesto a negociar con el vecino del norte la deportación de migrantes de otras nacionalidades.

Agregó que esta posición fue ratificada a los funcionarios de la Casa Blanca, como también el rechazo a que se separe a las familias de migrantes al entrar a Estados Unidos. Señaló que este asunto fue el motivo central de su viaje a Washington antes de viajar a Cuba.

Videgaray expuso que durante el diálogo que tuvo con los representantes de Trump no se abordó el tema de una próxima reunión entre los presidentes de ambos países y no hay ningún plan para un encuentro en el futuro inmediato.

Informó que la noche del miércoles dialogó vía telefónica con el secretario de Estado, Rex Tillerson, y acordaron verse en dos o tres semanas. En la conversación, dijo, dieron continuidad a la iniciativa de realizar un encuentro con los países del Triángulo Norte de Centroamérica dentro de dos o tres meses para discutir políticas de desarrollo, no de control migratorio.

El funcionario viajó ayer a La Habana, Cuba, para participar en la 22 reunión ordinaria del Consejo de Ministros de la Asociación de Estados del Caribe, que será presidida por el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla.