El patrimonio más importante de México es su cultura, incluso más que el petróleo o los tratados de libre comercio, dijo Enrique Graue, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), durante la inauguración ayer de la edición 38 de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería que concluirá el 6 de marzo.

Es una fiesta de libertad, de letras y de inteligencia, es una oportunidad para mejorar y para mejorarnos como nación, expresó durante el encuentro, que tiene un programa de casi millar y medio de actividades, como presentaciones editoriales, talleres y conciertos, y cuyo estado invitado es Querétaro.

También se refirió al término posverdad, que significa tergiversación de la verdad, lo cual explica la llegada del plutócrata que tenemos en la Casa Blanca. El mundo ha caído en los fenómenos demagógicos de la posverdad, porque en nuestro acceso a la información se vuelve cada vez más fácil e inmediato, sin que se hayan desarrollado las suficientes habilidades críticas de lectura para poder discernirla.

Graue destacó que nuestro país está urgido de que los mexicanos lean, interpreten lo leído y tengan una opinión informada del mundo que nos rodea y, en este sentido, México tiene grandes carencias, pues más de 4.7 millones de mexicanos son analfabetos” y 42 por ciento de los estudiantes de secundaria no cuentan con habilidades básicas de lectura.

Por su parte, María Cristina García Cepeda, titular de la Secretaría de Cultura federal, mencionó que durante la actual edición de la feria los lectores tendremos aquí los libros, esos interlocutores silenciosos, cómplices fieles y dispuestos que nos recuerdan que la cultura es una vivencia que se transforma en memoria, en luz para el camino.

Dijo que la dependencia a su cargo trae al encuentro “títulos de su catálogo histórico, que permiten a los jóvenes conocer parte de su patrimonio cultural y renovar la interpretación de alguno de los clásicos más importantes de la historia, junto a un panorama extenso de jóvenes autores, que tiene un diálogo con los lectores más noveles.

México dialoga con el mundo a través de su cultura y creo que esta feria es muestra de esa riqueza y esa potencia de nuestro país.

Por invertir en cultura

En su discurso, Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, definió al encuentro editorial como referente en la vida cultural de la capital y en el país, por el impulso al gusto por la lectura y la cultura. Además, estimó que se superará el número de asistentes de la edición anterior, porque cada vez es más amplia la convocatoria y la oferta de actividades.

El director de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, Carlos Agustín Escalante, detalló que habrá ciclos de divulgación sobre equidad de género, salud, economía y cultura de la legalidad y transparencia, así como de poesía, literatura de horror, novela negra y el de Los críticos recomiendan.

Habrá 838 presentaciones editoriales en las que participarán casi un millar de autores de obras literarias científicas y tecnológicas; 203 conferencias, 52 lecturas y recitales, 82 talleres (la mayoría para niños), 10 proyecciones y 12 conciertos

Carlos Anaya Rosique, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), pidió impulsar las industrias culturales, ya que son un factor estratégico para la economía del país. Somos creadores de bienes intangibles, básicos para el desarrollo y la convivencia social. Es hora de enfrentar la cerrazón y la estrechez de miras imperantes en el mundo y aprovechar nuestras capacidades para un desarrollo nacional, de invertir en cultura, no de reducir presupuesto. Las industrias culturales vivimos momentos difíciles, pero persistimos.

Expresó su duelo por las recientes muertes de los editores Carlos Noriega Milera, Eduardo Mateos Gay y Neus Espresate.

También participaron Francisco Domínguez, gobernador de Querétaro; Enrique Fernández Fassnacht, director general del Instituto Politécnico Nacional, y Fernando Macotela, director de la feria.