El Consejo Político Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) autorizará esta tarde al Comité Ejecutivo Nacional expedir la convocatoria a la 21 asamblea nacional del tricolor, que se realizará en agosto y tendrá como principal debate si se mantienen los candados impuestos desde noviembre de 2001 a la candidatura presidencial y, en caso de retirarlos, si se acepta la figura de postulación ciudadana.

El PRI pospuso el año pasado la asamblea nacional para evitar que se cruzara con las elecciones para gobernador en 11 estados. El plazo que autorizó la dirigencia vence en julio.

La convocatoria se emitirá, además, mientras se realiza el proceso interno para renovar la dirigencia de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP). Ayer el secretario de ese sector en la Ciudad de México, Jorge García, expresó su respaldo a José Murat, a fin de que éste sea elegido en una asamblea convocada para el 3 de marzo.

En una reunión con la CNOP capitalina ayer, el ex gobernador de Oaxaca manifestó que aportará su experiencia para entreverar a las generaciones del tricolor. Además de expresar su respeto al sector popular, que ha sido la fuerza del partido histórico de México, señaló que los priístas necesitan reagruparse para lograr que se respete a la militancia y a los simpatizantes. Asimismo, sostuvo que el PRI debe recuperar y poner en práctica la democracia y la justicia social, para lo que viene en 2018.

Murat realizará reuniones regionales con los cenopistas.

En tanto, en el PRI persisten dos grupos que han puesto a discusión la permanencia de los candados para ser candidato presidencial.

Durante su asamblea número 18 y ante la presión de los gobernadores tras la derrota de Francisco Labastida Ochoa, en 2000, el PRI incluyó en sus estatutos que los aspirantes a candidato presidencial deben contar con una militancia probada de 10 años, así como haber tenido un cargo de elección popular.

El sector duro del partido, que integra a ex gobernadores y ex dirigentes nacionales, ha planteado que esos candados deben prevalecer.

Sin embargo, un grupo de priístas que han formado parte del gobierno federal consideran que el PRI debe abrirse e incluir en sus estatutos la figura de candidato ciudadano, esto es, que funcionarios o simpatizantes sin militancia puedan ser nominados.

Entre quienes promueven la reforma de los estatutos durante la asamblea están Augusto Gómez Villanueva, ex dirigente cenecista, y José Ramón Martell, ex secretario de operación política del partido y ex diputado federal.