Con la instalación de un huerto urbano en la Magdalena Mixhuca, en una superficie de 24 mil metros cuadrados y con costo de 10 millones de pesos; la apertura de dos comedores, uno en la Central de Abasto y otro infantil en Iztapalapa; la colocación de 100 torres alimentarias, y la publicación de las leyes de Donación Altruista de Alimentos y de Huertos Urbanos, el Gobierno de la Ciudad de México fortaleció el Sistema de Sustentabilidad Alimentaria.

La promulgación de estas dos leyes la ponen a la vanguardia de las ciudades del mundo, afirmó el representante de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en México, Fernando Soto Baquero, en la presentación del Sistema de Sustentabilidad Alimentaria de la Ciudad de México, en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento.

El mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, agradeció la distinción, al asegurar que nos coloca como punta de lanza en esta estrategia de fortalecimiento alimentario.

Desglosó cada una de las nuevas acciones en la materia. Inició con el relanzamiento del proyecto Espiga, que será el huerto urbano sustentable más grande de América Latina, y siguió con los comedores de la Ceda, con un costo de 5 millones 500 mil pesos, y el infantil, con apoyo de la iniciativa privada, en los que se ofrecerán mil 800 raciones de comida al día a un costo de 10 pesos y mil 500 raciones gratuitas, respectivamente.