Dirigentes palestinos criticaron la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de dejar de exigir la solución de dos estados para el conflicto en Medio Oriente, que ha sido la constante de Washington y supone la creación de un Estado palestino independiente.

En conferencia de prensa conjunta con el primer ministro Benjamin Netanyahu, celebrada en la Casa Blanca, Trump reiteró que la coexistencia pacífica de Israel y Palestina no sería necesaria.

En Ramalá, Cisjordania, la dirigente de la Organización para la Liberación de Palestina Hanan Ashrawi, señaló que la nueva posición estadunidense carece de sentido y que Washington está tratando de satisfacer a la coalición extremista de Netanyahu.

El principal negociador palestino, Saeb Erekat, denunció que la declaración de Trump equivale a proponer eliminar el Estado de Palestina y adelantó que un eventual Estado único no será necesariamente un Estado judío. La única alternativa a una solución de dos estados, puntualizó, es un simple Estado democrático que garantice los derechos de todos: judíos, musulmanes y cristianos.

Horas antes del encuentro entre Trump y Netanyahu, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, afirmó: debe hacerse todo lo posible para preservar la posibilidad de una salida de dos estados.

Instantes más tarde, Francia –miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU– dijo por boca de su embajador François Delattre que el compromiso de su país con la solución de dos estados es más fuerte que nunca.