La práctica de carreras verticales adquiere nivel y los mexicanos intentan posicionarse en los mejores puestos, como intentarán hacerlo en calidad de anfitriones en la tercera edición de la carrera vertical en la Torre Latinoamericana, el 5 de marzo, prueba puntuable para el Premium Towerrunning Challenge Great Towers 2017, circuito de 12 rascacielos del mundo.

Gustavo Mendoza, ubicado en el octavo lugar de la clasificación mundial, y Alexis Trujillo, en el 24, se presentan como los mexicanos de élite que intentarán destronar al ganador del año pasado, el colombiano Frank Carreño, primero de Latinoamérica y tercero del orbe, quien se impuso con tiempo de 3 minutos y 42 segundos en el ascenso de 720 escalones hacia el piso 42 del edificio.

Si bien la Latino, la primera gran torre construida en México, es una de las más bajas del circuito mundial, el valor dentro de la competencia estriba en la altitud de esta ciudad, a casi 2 mil 200 metros sobre el nivel del mar, lo que complica la capacidad aeróbica.

Muchos corredores europeos y asiáticos viajan muchas horas para esta competencia de menos de cinco minutos, tiempo en el que suben a 2 mil 400 metros y el golpe es fuerte. Sin embargo, es un deporte muy seguro, afirmó Roberto Velázquez, presidente de la recién creada Federación Mexicana de Towerrunning.

El organismo, constituido en abril de 2016 como miembro de la Asociación Internacional, tiene conformada una selección nacional de 14 hombres y 12 mujeres, que entrenan de acuerdo con las necesidades en otras torres, como en el World Trade Center, otro edificio emblemático que podría homologarse como escenario de competencia.