Skaramangas, Grecia.

El ex portero Antonis Nikopolidis, quien sorprendió al ganar con Grecia la Eurocopa 2014, creó un equipo de futbol llamado Elpida (Esperanza, en griego) con jugadores refugiados de Siria, Yemen, Irak y Afganistán para ayudarlos a combatir el tedio y la desesperación a la que se enfrentan mientras se encuentran varados en el país mediterráneo.

La mayoría de los jugadores viven en Skaramangas, zona industrial al oeste de Atenas, donde han adaptado contenedores metálicos de viviendas.

El conjunto Elpida compite los domingos en una liga amateur, con equipos integrados por abogados, contadores y otros profesionales.

Nikopolidis, quien ahora tiene el cargo de técnico de la selección juvenil griega, dice que los entrenamientos y partidos sirven de distracción para los jóvenes que enfrentan un futuro incierto en el lento programa de reubicación de la Unión Europea.

Ayudamos a gente que se encuentra en un momento difícil de su vida, dijo el ex guardameta de 46 años de edad. Son huéspedes en nuestro país, y con este equipo intentamos darles unas horas de felicidad, agregó.

El futbol es el principal medio de diversión para muchos de los 60 mil refugiados y migrantes que viven en campamentos en diversos lugares de Grecia, mientras esperan la tramitación de sus solicitudes de asilo y un posible traslado a otro país europeo.

Tienes que pasar el tiempo (haciendo algo), porque es muy aburrido, dijo el sirio Hozaifa Hajdepo, de 23 años, quien juega en el Elpiada. Si te quedas en tu casa y no tienes trabajo, será como si murieras, aseveró.

La Unión de Asociaciones Europeas de Futbol (UEFA) otorgó subsidios de ayuda a los refugiados en 15 países y parte del dinero enviado a Grecia va al equipo de Nikopolidis.

Casi 9 mil refugiados han sido trasladados de Grecia a otros países de la Unión Europea, y el entrenador ha perdido a varios jugadores. Pero al paso actual de las reubicaciones, que no alcanza a la mitad de la meta propuesta, la mayoría prevé estar mucho tiempo en territorio griego.

Para mí es una alegría hacer esto. Lo más importante es que lo disfrutan... Hemos creado un grupo de amigos con lazos de familia, afirmó Nikopolidis