Aun cuando ya no existe la guerra fría, la humanidad sigue en riesgo por las más de 15 mil ojivas atómicas que existen en el mundo, señaló el embajador Luiz Filipe de Macedo Soares, secretario general del Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe (Opanal).

En víspera del 50 aniversario de Tratado de Tlatelolco, que se celebrará en México este martes, manifestó su preocupación por la decisión de asignar grandes presupuestos para modernizar el armamento atómico. Por ejemplo, señaló que el gobierno estadunidense aprobó un gasto de 3 billones de dólares para 30 años.

La finalidad es tornar más eficientes las armas nucleares, lo cual no es una buena noticia, subrayó en entrevista con La Jornada, en la cual resaltó la importancia de la conferencia especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que se realizará en 2017, para empezar a negociar la prohibición de estos dispositivos.

La reunión tendrá lugar después de que en los pasados seis años no ha habido avances en la desnuclearización militar. Los dos grandes poseedores de ese tipo de arsenales –Estados Unidos y Rusia, propietarios de 90 por ciento–, negociaron en 2010 su reducción, pero después de ello no ha habido ningún otro progreso, explicó De Macedo Soares.

El ex embajador de Brasil en México, India y Noruega recordó que en años recientes, la ONU ha tratado de avanzar en el desarme. Pero no fue sino hasta el 23 de diciembre de 2016 cuando se aprobó una resolución para celebrar en marzo, junio y julio del próximo año, una conferencia que tendrá el fin de pactar un instrumento jurídicamente vinculante que conduzca a la total eliminación de dicho material.

El documento, promovido inicialmente por México, Brasil, Austria, Irlanda, Nigeria y Sudán, contó con la aprobación de 70 por ciento de los estados miembros. El 30 por ciento restante se dividió entre los que votaron en contra, los que se abstuvieron y los que prefirieron no participar, recordó en la conversación efectuada en las oficinas de la Opanal, organismo creado por el Tratado de Tlatelolco y gracias al cual se logró que Latinoamérica sea una región libre de dispositivos atómicos.

De los países poseedores de ojivas, agregó que cinco votaron en contra del resolutivo; China, India y Pakistán se abstuvieron y Corea del Norte no sufragó. De los integrantes de la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Italia, que tiene misiles nucleares de Estados Unidos en su territorio, votó a favor, y Holanda, quien también tiene armamento de ese país, se abstuvo.

Todo esto hace ver un movimiento muy fuerte que va infiltrando los círculos más duros del mundo de las bombas atómicas, agregó el diplomático especializado en temas de seguridad internacional.

–¿Cuántas armas nucleares hay en la actualidad? –se le preguntó.

–Poco más de 14 mil. Estados Unidos y Rusia tienen 7 mil cada uno. De ellas, mil 500 están en posición para ser lanzadas en cuestión de minutos. Eso ya es suficiente para que desaparezcamos. Francia y Reino Unido tienen una centena. De China, India y Pakistán no se sabe muy bien, y Corea del Norte hace sus primeros ensayos.

–Hay personas preocupadas por el manejo que puede dar el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a este armamento –se le comentó.

–Puede haber temor en muchas personas, pero no hay ninguna determinación concreta conocida sobre el tema.

–¿Qué se puede esperar de la conferencia de la ONU?

–Comenzará la negociación de un tratado. Aunque no se parte de un proyecto, nuestro interés es avanzar lo más posible. Hay ánimo positivo. Que 70 por ciento haya votado a favor representa una corriente importante. La idea es sacar un acuerdo para prohibir y hacer ilegal este armamento.

Como parte de los festejos por el 50 aniversario que Tratado de Tlatelolco, promovido por el mexicano Alfonso García Robles, se realizará en la Secretaría de Relaciones Exteriores una ceremonia, y este lunes comenzó un seminario internacional que contará con la presencia de expertos en la materia.