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La Orquesta de Cámara de La Habana y la cinta La primera función abren las actividades

La Cinemateca de Cuba festeja 57 años de resguardar el acervo fílmico de la isla

Memorias del subdesarrollo, Una pelea cubana contra los demonios y Los sobrevivientes, dirigidas por Tomás Gutiérrez Alea, y Retrato de Teresa, de Pastor Vega, cintas restauradas que se exhibirán

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Fotograma de Fresa y chocolate y de Memorias del subdesarrollo, unas de las cintas más importantes del patrimonio cinematográfico cubano
 
Periódico La Jornada
Jueves 9 de febrero de 2017, p. 8

En la sala Charles Chaplin, ubicada en el barrio de Vedado, en La Habana, han sido proyectadas las películas más importantes de Cuba y de todo el mundo.

Es sede del recinto en el que se archiva, protege, divulga y conserva el patrimonio fílmico cubano y latinoamericano... y de otras partes del mundo.

Hablamos de la Cinemateca de Cuba, que junto con el cine 23 y 12 –sala que en los años 40 aún se llamaba Astor–, es el escenario de las ediciones del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, que cada año se realiza en la capital cubana.

Para Fidel Castro, el cine era una gran batalla por la identidad, liberación, independencia y supervivencia latinoamericanas. Tres meses después de entrar triunfante a La Habana, en enero de 1959, el comandante, que consideraba al cine de gran impacto social, ordenó crear el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), que fue gestor para la construcción de la Cinemateca de Cuba, que este miércoles empezó los festejos de sus 57 años. Fue creada sólo un año después de la fundación del ICAIC, en ese empeño de formar auditorios.

El arranque de las celebraciones, comentó a la prensa su director Luciano Castillo, se dio este miércoles en el cine 23 y 12, pero durante todo el año se realizarán actividades.

Llegamos a 57 años con no pocos resultados y muchos planes, unos perspectivos y otros en distintas fases de ejecución, dijo Castillo a la prensa.

Destacó que la institución a su cargo restauró cuatro clásicos cubanos: Memorias del subdesarrollo, Una pelea cubana contra los demonios y Los sobrevivientes, dirigidos por Tomás Gutiérrez Alea, y Retrato de Teresa, de Pastor Vega.

Estas restauraciones ya fueron exhibidas en la sección Clásicos, en el pasado encuentro de cine de La Habana, pero también se proyectarán este mes como parte de la programación de la efeméride.

La ceremonia de apertura incluyó un concierto de la Orquesta de Cámara de La Habana y la exhibición del documental La primera función, mediometraje que reúne los cortos exhibidos originalmente en la primera proyección cinematográfica mundial, ocurrida el 28 de diciembre de 1895, en París, Francia.

En la gala se proyectó la copia definitiva del clásico El chicuelo, de Charles Chaplin, tras ser restaurada por un convenio por la Cinemateca de Bolonia, Italia.

Castillo informó: “Ahora están en fase de reconstrucción en el Departamento de Cine de la Universidad de Los Ángeles otros cinco clásicos: La Virgen de la caridad (1930), de Ramón Peón, que cierra el periodo del cine silente en Cuba; La serpiente roja (1937), de Ernesto Caparrós, el primer largometraje sonoro; Estampas habaneras (1939), de Jaime Salvador; Casta de roble (1953), de Manuel Alonso, y Cuba baila (1960), dirigida por Julio García Espinosa, la primera producción del ICAIC”.

La Cinemateca se creó en momentos en que sólo existía el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos como productor y luego, al surgir otras instituciones como los Estudios de las FAR, los del ICRT o Cinematografía Educativa, sólo se preocupó por conservar la información y las copias del ICAIC, por lo que el resto está disperso.

Recuperar el tiempo perdido

Uno de nuestros propósitos es recuperar ese tiempo perdido y que rinda honor a su nombre de Cinemateca de Cuba y no Cinemateca del ICAIC.

Antonio Mazón Robau, programador de la institución, señaló que este mes se prepara, asimismo, un ciclo completo del cubano Jorge Molina. Además, se proyectarán, en dos partes, los 100 mejores filmes, seleccionados mediante una encuesta a críticos y especialistas.

Castillo anunció la visita del cineasta alemán Werner Herzog, quien el sábado 11 de marzo impartirá una clase magistral. Ofrecerá también un taller en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños.

Pese a ser filmes críticos de la realidad de la isla, Alicia en el pueblo de Maravillas y Fresa y chocolate –dirigido por Tomas Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabio– también se han convertido en clásicos de la filmografía cubana. Tan influyente fue la cinta de Gutiérrez Alea y Tabio que a partir de su nombre se creó el Centro Cultural Cinematográfico Fresa y Chocolate, donde también se exhibe cine de arte.

Fresa y chocolate, protagonizada por Jorge Perugorría y Vladimir Cruz, fue postulada a mejor película extranjera para un premio Óscar, en 1995.

El directivo consideró que la institución ha cumplido gran parte de sus objetivos, sobre todo en lo relativo a contribuir a la formación de un público cualitativamente superior y, algo que no todos conocen, a promover los cine-móviles.

Paralelamente se ha mantenido la programación fílmica en la sede capitalina, el cine 23 y 12, en casi todas las capitales provinciales la Cinemateca está presente también.

Muy importante para el colectivo de la Cinemateca es poder remozar el cine 23 y 12 y abrir en los próximos meses la librería Gérard Philipe, la primera especializada en el ámbito audiovisual en Cuba, así como el Café Buñuel.

Según un texto de Granma, Iván Giroud, director del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, inauguró el pasado diciembre el equipamiento más moderno de su tipo en Cuba, gracias a la contribución de varias instituciones italianas.

La Cinemateca pretende la recuperación de sus principios fundacionales de atesorar todo el cine cubano, no sólo la producción del ICAIC.

Según el artículo de Granma, terminar la remodelación del cine 23 y 12 –con su lumínico ya restablecido por el aporte del artista de la plástica Kadir– es un propósito clave de la Cinemateca.

La remodelación incluiría, además, el Café Buñuel, la librería Gérard Philipe, el acondicionamiento de su galería expositiva y de una pequeña sala de proyecciones con el apoyo del Ministerio de Cultura.

Desde sus inicios la Cinemateca de Cuba ha trabajado en el rescate de filmes, documentales, noticieros, materiales publicitarios, carteles, colecciones de fotografías de producciones, recortes de prensa, libros especializados y todos los materiales que reflejen aspectos costumbristas y de la historia. Cuenta además con una biblioteca y una hemeroteca especializada en cine y otras artes visuales.