Boston.

Los jugadores afromaericanos de los Patriotas de Nueva Inglaterra Martellus Bennet, Devin McCourty y Dont’a Hightower no acudirán a la Casa Blanca para la recepción con el presidente Donald Trump, quien ha desatado polémica por sus medidas antimigratorias y raciales.

Yo no voy a la Casa Blanca, dijo McCourty a la revista Time. La principal razón es que no me siento aceptado. Con las fuertes opiniones y prejuicios del presidente (Donald Trump), creo que algunas personas pueden sentirse aceptadas y otras no, agregó.

El defensa dejó claro que la decisión de asistir al acto es una elección personal, pero en su caso no puedo imaginar una manera de ir allí.

McCourty y Bennet fueron los primeros integrantes de los Patriotas en rechazar la invitación de visitar en la Casa Blanca a Donald Trump, mientras Dont’a Hightower confirmó este miércoles que no asistirá al reconocimiento, aunque no precisó si su decisión es a causa de las resoluciones del mandatario.

El también afroamericano James White, quien implantó marcas de 14 recepciones y 20 puntos anotados en el Supertazón, dijo que no estaba seguro de asistir. Esperaré a que llegue el momento y entonces decidiré, apuntó poco antes del encuentro por el título Vince Lombardi.

Marttellus expuso su postura contra las decisiones de Trump el mismo día en que vencieron a los Halcones de Atlanta y ganaron el Supetrazón 51. ¡Derriben el muro, amo a México!, gritó al término del partido. Es lo que es. La gente sabe cómo me siento al respecto (de la llegada de Donald Trump a la presidencia). Sólo síganme en Twitter, añadió.

Antes del juego del domingo Bennett dijo al diario Dallas Morning News que probablemente no iría a Washington, porque no apoyo al tipo que está en la casa.

El ala cerrada afirmó que no estaba preocupado por la reacción que podrían tener Robert Kraft, dueño del equipo, y Tom Brady, mariscal de campo, ambos partidarios de Trump.

No es la primera vez que McCourty y Bennet expresan su postura en favor de las minorias. Ambos son parte del grupo de jugadores que han apoyado las protestas contra la discriminación racial que realiza Colin Kaeperknick, mariscal de campo de San Francisco, al levantar el puño después del himno nacional en los partidos de la NFL.