Abrieron la muestra Tres siglos de grabado de la Galería Nacional de Arte de Washington
Jueves 9 de febrero de 2017, p. 6
Escenas de furia, rebelión y expansión, desde que se franquea el primer portón de madera hasta que se recorre el último salón, aparecen en Tres siglos de grabado de la Galería Nacional de Arte de Washington, que el martes se inauguró en el Antiguo Colegio de San Ildefonso.
Rostros indígenas, paisajes, escenas históricas y guerras se registran en las imágenes que permiten acercarse a la representación de Estados Unidos mediante impresiones hechas de 1710 a 2010, que han viajado desde su sede de mármol de diseño neoclásico hasta ese edificio barroco en el Centro Histórico de la capital mexicana.
Sirva esta muestra como una invitación para descubrir y apreciar, a través del grabado, el registro de gustos, ideales, ansiedades y aspiraciones de sus creadores, inmersos en los procesos sociales, culturales, económicos y políticos de su entorno
, se introduce al visitante.
Los grabados han sido una técnica para transmitir rápidamente escenas de actos contemporáneos, por lo que han abierto un foro de crítica social y debate. De acuerdo con el museo estadunidense, la exposición incluye obras que a través de los siglos apuntan a crear conciencia e inspirar el cambio
.
La hermosa y exuberante Marilyn, labios provocadores y tonos chillantes de la paleta del artista pop Andy Warhol, es una de las piezas más reconocidas que el recinto estadunidense ha traído a México, entre otros cien artistas, como Pollock, Lichtenstein, Albers y Calder.
A contracara del muro, otra gráfica de autoría feminista del colectivo Guerrilla Girls cuestiona en una leyenda en inglés, cuya traducción es: ¿Las mujeres tienen que estar desnudas para poder entrar al Museo Met?
La litografía de 2007 es parte de la propagación de mensajes sobre la discriminación racial y de género.
Rivera, Siqueiros y Orozco
Una masacre en Boston, grabado de Paul Revere de 1770, destaca en el primer salón no sólo por ser una de las piezas más antiguas en exhibición, sino porque documenta cómo soldados británicos dispararon y mataron a cinco hombres en represalia por una agresión con bolas de nieve. El panfleto fomentaba el enojo e incitaba a tomar las armas.
La selección comenzó con 22 mil grabados, reveló Amy Johnston, cocuradora de la exposición, tras concluir un recorrido por los nueve núcleos temáticos de la muestra, desde los intercambios trasatlánticos y la expansión hasta llegar al arte pop y el sueño del consumismo, así como el clima de rebelión y activismo contestatario de los años 60 del siglo pasado. Todo un itinerario por la evolución de la gráfica y las ideas entintadas.
Queríamos representar los principales movimientos en el arte del grabado, y al mismo tiempo, los mejores trabajos de los artistas más importantes
, apuntó. ¡Oh, Gosh!
, expresó antes de romper en risa nerviosa cuando se le preguntó qué dejó fuera, pues la lista es inmensa.
Entre paredes con piezas de Rivera, Siqueiros y Orozco, Johnston afirmó que lo interesante de esta exposición es el intercambio profundo entre los artistas de Estados Unidos y de México
. Mientras los muralistas eran invitados al país del norte a hacer obras, muchos estadunidenses están fascinados con lo que sucede en México después de la Revolución, por lo que viajan al país y se inspiran. Toda esta zona es un reborde de la influencia entre ambos países
.
En su opinión, ese intercambio cultural continúa y espero siga adelante, en especial con los impresores contemporáneos
.
La curadora estadunidense, así como las fichas en el museo mexicano, destacan que la muestra de grabado, que primero se montó en Washington en 2016, que concluirá en San Ildefonso (Justo Sierra 16) el 30 de abril, es ejemplo de una importante historia de reciprocidad y lazos de amor entre las instituciones culturales de ambas naciones
.