El pesista fue operado ayer del hombro
Domingo 5 de febrero de 2017, p. a15
Un cuarto lugar olímpico abre las puertas y a mí me las han cerrado. Los deseos de seguir triunfando y buscar la medalla en Tokio 2020 es lo que me impulsa
, afirmó Bredni Roque, campeón panamericano en levantamiento de pesas en menos de 69 kilogramos, quien fue intervenido quirúrgicamente del hombro izquierdo en un hospital privado de la Ciudad de México.
Después de su participación en Río 2016 con un uniforme de entrenamiento en el que cubrió con cinta adhesiva las marcas patrocinadoras (el que le dieron no era de su talla) y que causó polémica entre los directivos que se echaban la culpa unos a otros, Bredni lo único que ha recibido son golpes bajos desde el pasado 9 de agosto, cuando subió a la tarima para levantar 326 kilogramos (145 arranque y 181 envión).
A partir de esa fecha se quedó sin entrenador, ya que el cubano Omar Broche, quien lo asesoró en la justa olímpica, no lo hizo adecuadamente y se lesionó del hombro izquierdo por un mal levantamiento en el arranque; al paso de los meses el dolor era insoportable y no entrenaba
, dijo el pesista, quien fue operado ayer.
Medio año de ir y venir, de tocar puertas, de dar vueltas
, sin tener respuestas, narra con desconsuelo el mejor competidor que tiene el país en la rama varonil de la disciplina.
Su caso lo conocen todos
, hasta el presidente de la federación, Rosalío Alvarado, quien se ha eternizado en el cargo y en un acto de revanchismo le retiró el equipo con el que entrenaba Roque, quien durante esos seis meses realizaba sus rutinas en un gimnasio privado.
Por estar en el top ten de la halterofilia mundial y su actuación en Río, Roque ganó el Premio Estatal del Deporte 2016 que le entregó el gobierno de Quintana Roo. Levantó la voz para solicitar apoyo. Recibió promesas y nadie le cumplió.
Del Instituto del Deporte de la entidad cada vez que voy me cierran las puertas y ni beca tengo
. Como becario del fideicomiso Compromiso Integral de México con sus Atletas propuso a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte la contratación del técnico cubano Yosbiel García Castañeda y tampoco ha tenido respuesta satisfactoria de las necesidades primordiales que requiere un atleta de alto rendimiento.
La mira a Tokio 2020 no me ha desanimado y quiero que me abran las puertas, pero aquí ha sido todo lo contrario. No han resuelto nada. Estaré seis semanas con un cabestrillo y espero regresar en dos meses a las pesas para defender el título y mis récords en el Panamericano de Miami, en junio, y luego el Mundial en Los Ángeles, en noviembre
, aseveró el pesista de 29 años, quien nació en Cuba y que representa a México tras adoptar la nacionalidad cuando contrajo matrimonio con Carolina Valencia, triple medallista del orbe en el mismo deporte.