Comenzó la primera temporada de 2017 de la Orquesta Sinfónica del IPN
La mayor fortaleza de la agrupación es hacer bien las cosas, expresa su titular, Enrique Arturo Diemecke, a La Jornada
Celebra la respuesta del público estudiantil en los conciertos
Sábado 4 de febrero de 2017, p. 5
La Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional (Osipn) comenzó esta semana su primera temporada de 2017 y, con ello, empezó el último de los tres años del contrato de Enrique Arturo Diemecke, su titular artístico.
El músico originario de la Ciudad de México, quien durante 16 años estuvo al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional (1990-2006), adelanta a La Jornada su interés por proseguir al frente de la agrupación politécnica.
Ya veremos, es algo que se irá platicando al término de este tercer año
, expresa el también compositor y violinista. Destaca que conseguir que los músicos tengan ganas de hacer las cosas bien
, además de que experimenten un crecimiento técnico en lo individual y lo colectivo, son los principales logros desde que asumió las riendas de esa orquesta en septiembre de 2014.
Titular de diversas agrupaciones sinfónicas en el mundo, como las filarmónicas de Buenos Aires y Bogotá, así como las orquestas de Flint y Long Beach, Diemecke comenta que esta primera temporada del año tiene como eje a dos figuras centrales de la cultura occidental: Apolo y Dionisio.
Usar a esas dos figuras de la mitología griega responde a un interés por acercar a nuestro público a las artes. Estamos en un instituto abocado a la ciencia y la tecnología y nos interesa mucho que los estudiantes y demás gente que asiste a nuestros conciertos se apeguen un poco más a las humanidades
, explica.
En los conciertos se evocará una selección de imágenes creadas por artistas como Piero della Francesca, Alfred Hitchcock, Modest Mussorgsky y Sandro Botticelli, en las que se recordará su genio creativo a partir de la interpretación orquestal.
De modo paralelo se efectuará el Festival Brahms Sinfónico, el cual celebra el legado del compositor en su 120 aniversario luctuoso, por lo que en 2017 se ejecutarán algunas de sus sinfonías.
Un sonido más compacto
Diemecke indica que se encuentra por consolidar la última fase de su proyecto, que comprende el desarrollo profesional y artístico de la orquesta.
Siempre pongo tres años de meta para la búsqueda de la reafirmación del organismo. Lo que busco en ese tiempo es que la orquesta crezca de forma interna en las partes técnica, de interpretación y de proyección.
El principal elemento que identifica a la agrupación es su sonido, la forma de tocar: “Se va aglutinando más la parte de que los músicos toquen de una manera en la que el sonido sea más compacto.
Espero que nadie se ofenda, pero la acústica de nuestra sala no necesariamente es la mejor y la orquesta trabaja para sacar la mejor ventaja de esa limitante.
Respecto de cuál es la mayor fortaleza del conjunto, responde que son las ganas de hacer las cosas bien. Es lo que ha permitido que la orquesta haya crecido en tan poco tiempo, a pesar de las circunstancias, como el paro de labores del año pasado. Los músicos han mostrado muchas ganas y esa actitud ha ayudado mucho a que el trabajo se esté cumpliendo
.
Para el director es muy significativa la respuesta que ha tenido la Osipn del público estudiantil, no sólo en los conciertos en su sede de Zacatenco, sino en los efectuados en las diversas escuelas del instituto, como parte del programa Repartiendo el queso.
Los conciertos de la Osipn son jueves y sábados, a las 19 y 13 horas, de forma respectiva, en el auditorio Alejo Peralta del Centro Cultural Jaime Torres Bodet (avenida Wilfrido Massieu s/n, esquina avenida IPN, Zacatenco.)