El Instituto Nacional Electoral (INE) gastó 73.6 millones de pesos en planear las torres gemelas, cuya construcción se canceló como parte de las medidas de austeridad aprobadas ayer en la junta general ejecutiva.

En tanto, la rebaja salarial que se aplicará a 32 altos mandos se traducirá en 10 millones de pesos de ahorro anual, informó el titular de la dirección ejecutiva de administración, Bogart Montiel.

También dejarán de gastarse 300 mil pesos por el servicio de celulares que ya no se pagarán durante 2017, según las medidas de austeridad aprobadas en la junta general ejecutiva del instituto.

Con la reducción de 10 por ciento al sueldo tabular, el consejero presidente Lorenzo Córdova y sus 10 colegas ganarán 160 mil pesos mensuales netos en vez de los 177 mil pesos que obtenían hasta ayer.

En el grupo de funcionarios contemplados originalmente en las reducciones salariales se incluyó a Emilio Giménez Cacho, coordinador de asesores del consejero presidente, quien ganaba 139 mil pesos mensuales netos, de los salarios más elevados en el INE.

A los funcionarios que dejarán de gozar de la prestación del servicio celular se sumaron el coordinador de asesores de la presidencia, su secretario particular y el de logística, así como el coordinador de asesores y el secretario particular de la secretaría ejecutiva.

Montiel anunció que habrá nuevas medidas en febrero, luego de que la junta general ejecutiva analice en qué renglones o partidas de gasto puedan aplicarse.

El 2 de febrero el INE devolverá a la Tesorería de la Federación los mil 70 millones 49 mil pesos que ya no gastará en la construcción de las torres gemelas.

Córdova explicó que ese día vence el plazo de inversión de rendimiento financiero, para que el dinero pueda ser destinado a áreas socialmente prioritarias.

Actualmente hay mil 87 millones 950 mil pesos disponibles en el fideicomiso para la remodelación de la nueva sede y 55.7 millones de pesos por intereses generados a enero de 2017.

Sin embargo, en la frustrada remodelación se gastaron 73.6 millones de pesos en el concurso nacional de ideas, los estudios técnicos, el plan maestro y el proyecto ejecutivo.

Racionalidad y sustento

En sesión de la junta general ejecutiva se formalizó esta medida anunciada hace 14 días. Ahí Córdova informó que de todos modos se concluirá el proyecto de las nuevas instalaciones en caso de que se decidan construir dichas torres posteriormente, cuando el contexto económico lo permita.

Defendió el cancelado plan de remodelación, porque tenía racionalidad y sustento e iba a rendir beneficios a mediano-largo plazo.