Monterrey, NL.

El ex gobernador priísta Rodrigo Medina de la Cruz acudió ayer ante la subprocuraduría anticorrupción para responder una nueva acusación en su contra por enriquecimiento ilícito, interpuesta por la Contraloría estatal.

Al término de la comparecencia, dijo estar tranquilo y que su patrimonio ha estado perfectamente declarado año con año. Los próximos jueves y viernes se presentará ante el juez de control para seguir con el proceso que forma parte de la Operación Tornado, en la cual se investigan presuntos desvíos que habrían causado al erario un quebranto de 3 mil 600 millones de pesos.

Tenemos la plena tranquilidad de lo que contienen las declaraciones, pero vamos a ver qué manifiestan, dijo Medina de la Cruz.

Dio a conocer que obtuvo una suspensión provisional en vías de amparo para evitar ser detenido por enriquecimiento ilícito. En la ley local, este delito puede castigarse hasta con 14 años de prisión.

Dijo que pidió copia de la investigación para responder por escrito. “No hemos cometido ningún acto ilícito; sin embargo, hay que atender el llamado de la autoridad. No tengo conocimiento sobre el contenido de la carpeta, en este momento se nos ha informado.

Es una investigación y la autoridad ministerial nos cita para que nos enteremos. Si consideran que existen elementos para llevar a cabo una imputación ante el juez, lo harán; ahora estamos en la fase de investigación, indicó el ex gobernador.