Restauran escultura de Miguel Ángel
Instalan luces led en la estatua emplazada en Roma para que brille como en el siglo XVI
Miércoles 25 de enero de 2017, p. 5
Roma.
El Moisés y el conjunto escultórico de la tumba del papa Julio II en Roma recuperan su impresionante colorido luego de los trabajos de restauración y la instalación de un sistema de luces que restablece la vista original de la obra de Miguel Ángel.
La escultura, emplazada en la basílica de San Pedro en Vincoli, vuelve a brillar después ser limpiada y adosada con luces de led que recrean las condiciones lumínicas del siglo XVI, en las que el artista se basó para crear el mausoleo, difundieron medios locales.
El curador Mario Nanni encabezó el proyecto de remozamiento, una colaboración pública y privada de la superintendencia del Coliseo y el grupo Il Gioco del Lotto, que se reveló ayer.
Habían pasado 15 años desde la vez más reciente en dar mantenimiento a ese espacio.
La finalidad es recuperar los colores del mármol de Carrara, material elegido por Miguel Ángel, pero conservando la pátina, y revela al artista como escultor de la luz
, se dijo en conferencia de prensa.
Siete millones de visitantes al año
Si la mala noticia es que en un monumento símbolo como el Pan-theon, que recibe 7 millones de visitantes al año, en breve deberá pagarse por la entrada –según anunció hace días del titular del Ministerio de Cultura, Dario Franceschini–, la buena noticia es que la fatiga de recorrer la estrecha escalinata para alcanzar la basílica de San Pedro in Vincoli no será mejor recompensada, porque su mayor tesoro, el Moisés, no sólo seguirá siendo gratuito, sino desde ahora podrá disfrutarse con toda su belleza original gracias a una restauración que la renueva, sobre todo por la iluminación que permitirá gozarlo en su aspecto originario.
Miguel Ángel concibió la estatua en reciprocidad con el espacio, condicionando incluso el tipo de acabado del mármol según se ha descubierto tras el restauro, que variaba según la iluminación, la cual era un elemento indispensable para potencia su belleza y disfrute.
Las modificaciones arquitectónicas de la iglesia fueron borrando tales sutilezas, en particular una ventana que fue cerrada en el siglo XIX, en la que se filtraba desde lo alto la luz natural irradiada por la estatua.
Nanni informó que se debieron utilizar técnicas informáticas y luces de led para lograr el efecto natural necesario. Ha, por tanto, tenido que interpretar la luz natural presente en la iglesia, y modularla siguiendo el cambio de intensidad del resplandor a lo largo del día: del alba al anochecer.
Propone el superintendente Francesco Prosperetti, adoptar ese ejemplo como modelo para los restauros no sólo entre patrocinios público y privado (en este caso Il Gioco del Lotto), sino también que el patrocinador no se limite efectuar un remozamiento, sino, como en este caso, lo mantenga en el tiempo.
El restaurador del Moisés, Antonio Forcellino, entrevistado por Artribune, las novedades que emergen “se refieren al tratamiento de las esculturas de parte de Miguel Ángel, que pulió con el plomo sólo las partes mayormente emergentes de la escultura, las que recibían la luz directa, dejando las restantes a un acabado de piedra pómez y arena, obteniendo un acabado más rústico. Las esculturas adquieren una profundidad del todo nueva, un carácter pictórico. Esto es claro en el Moisés, en especial en el brazo izquierdo, que lleva a un pulido reflejando la luz de manera extraordinaria, así sobre todo el tórax se ve muy atrás porque está mucho menos elaborado”.
El Moisés fue esculpido en torno a 1515 y su creador trabajó muchos años, aunque debió suspenderse para la construcción de San Pedro. Para Miguel Ángel fue una desilusión tal, que lo llamó la tragedia de la sepultura
.