En vísperas de que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos, diversas organizaciones sociales, sindicales y partidos manifestaron su rechazo a las políticas anunciadas por el republicano en relación con México, al tiempo que hicieron un llamado al gobierno de Enrique Peña Nieto a ‘‘no ser sumiso’’ y adoptar una política exterior en defensa de la soberanía y la dignidad del pueblo, además de impedir atropellos contra los connacionales migrantes.

Organizaciones de la Nueva Central Sindical y del Frente Amplio Social Unitario convocaron a una jornada de protesta nacional en contra de la llegada del gobierno ‘‘neofascista’’ de Trump a la Casa Blanca. La manifestación tendrá lugar este viernes frente a la embajada de Estados Unidos en México.

Se prevé la presencia, entre otros, del Sindicato Mexicano de Electricistas, diversas secciones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, el Sindicato de Trabajadores del Transporte de Pasajeros Federal, Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma de Chapingo y la Alianza de Tranviarios de México.

Resistencia al gasolinazo

Mientras, organizaciones civiles llamaron ayer a conformar la primera asamblea nacional de resistencia al gasolinazo, las reformas estructurales y la represión de la protesta. ‘‘Hay un movimiento ciudadano emergente que va ganado confianza y perdiendo el miedo’’, afirmó el sacerdote y activista Alejandro Solalinde, quien junto con integrantes de la Coordinadora Metropolitana de Resistencia y de la Comunidad de Ixmiquilpan en Lucha, anunciaron para este viernes la marcha #StopTrump, la cual partirá de la embajada estadunidense al Zócalo capitalino.

A su vez, los partidos de la Revolución Democrática y del Trabajo demandaron al gobierno de México ‘‘no ser sumiso’’ y adoptar una política exterior en defensa de la soberanía y la dignidad del pueblo, además de impedir atropellos contra los connacionales migrantes. El coordinador de los senadores del PRD, Miguel Barbosa, manifestó que la posición del Estado debe ser de firmeza, de patriotismo y de dignidad nacional.

Por su parte, integrantes de la Alianza por la Salud Alimentaria afirmaron que en un periodo de tres años el país podría aumentar la productividad del campo para dejar de depender de la importación de granos básicos de Estados Unidos. Esa sería una manera de responder a las amenazas y actos que pudiera emprender Donald Trump.