Lunes 16 de enero de 2017, p. 24
Natal.
Al menos 26 presos fueron asesinados, algunos de ellos decapitados y desmembrados, durante un brutal enfrentamiento entre grupos criminales en la penitenciaría de Alcacuz, la mayor del estado de Río Grande del Norte, noreste de Brasil, que fue controlado por las autoridades este domingo tras 14 horas de violencia.
Walber Virgolino, titular de la Secretaría de Justicia del estado, informó que seis líderes de la rebelión ya fueron identificados, y se espera que sean trasladados a prisiones federales este martes.
De acuerdo con las autoridades, la riña comenzó a las 16:30 (hora local) del sábado, cuando miembros de las bandas criminales Primer comando de la capital y Sindicato del crimen pudieron salir de sus pabellones para enfrentarse.
Momentos antes, los internos cortaron la electricidad del penal con la intención de bloquear la señal de todos los teléfonos celulares. Además, un grupo de hombres arrojó armas al interior de la prisión.
La mañana de este domingo vehículos blindados de la policía militar entraron al presidio; ya en la tarde el motín estaba controlado.
La mayoría de los cuerpos están mutilados. El gobierno estatal alquiló un camión frigorífico para transportar los restos.
En un principio, las autoridades reportaron sólo 10 decesos, posteriormente se especuló que eran 30 y luego 27, pero la cifra se corrigió a 26, porque un cadáver fue contado dos veces, confirmó Caio Bezerra, secretario de Seguridad Pública de ese estado.
Este enfrentamiento elevó a más de 100 los reos fallecidos en las hacinadas cárceles de Brasil en los primeros 15 días del año. El 1º de enero, un motín dejó 56 presos muertos en Manaos. Cuatro días después hubo otro motín en una prisión de Roraima, donde 33 internos fueron asesinados.
En este contexto, en las cárceles de Perú, donde hay un total de 81 mil internos, al menos 14 mil presos padecen alguna enfermedad; de ellos 10 mil tienen problemas broncopulmonares, 3 mil 100 padecen tuberculosis, 316 tienen sida, 232 cáncer y 518 padecen transtornos mentales, informó el Instituto Nacional Penitenciario.