Lejos de adelgazar su estructura, este año el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) contará con nuevas áreas y dio a su presidencia la facultad de crear diversas direcciones.

El actual reglamento interno del tribunal, publicado el 29 de diciembre de 2016 en el Diario Oficial de la Federación, modifica algunos aspectos de la estructura de este organismo.

Horacio Duarte, representante de Morena, señaló que es un contrasentido esta modificación con las medidas de austeridad establecidas en diversas instancias y con la abultada nómina, de 546 millones de pesos anuales, que representan 146 altos mandos de ese organismo.

La Jornada publicó ayer que en esta plantilla de élite cada magistrado recibe percepciones brutas de 6.7 millones de pesos anuales y un secretario de estudio de cuenta de nivel alto, 3 millones 79 mil 450.

La creación de nuevas áreas puede ser un mecanismo para generar pago de favores y estas facultades dadas a la presidencia abren la puerta para que se pueda crear estructura en todo momento, expresó el también dirigente de Morena en el estado de México.

Un cambio es que se otorga al titular de la presidencia del tribunal, actualmente la magistrada Janine Otálora Malassis, la facultad de crear, dentro de las áreas que le están adscritas, las comisiones, coordinaciones y direcciones necesarias del personal jurídico, administrativo y técnico requeridas.

Asimismo, se crea la Unidad de Apoyo Jurisdiccional, a la cual se le otorgan facultades como si fuese una autoridad fiscalizadora de los partidos políticos, ya que dará seguimiento a los procedimientos relacionados con los ingresos y egresos de los mismos.

Dicha unidad nueva depende de la presidencia, que en vez de tener a su cargo seis coordinaciones, tendrá dos: la de jurisprudencia, seguimiento y consulta y de comunicación social, así como cinco direcciones generales.

De ser coordinaciones pasarán a ser direcciones las de relaciones con organismos electorales; de igualdad de derechos y paridad de género; la de información y documentación; la de asuntos jurídicos y la de transparencia, acceso a la información y protección de datos.

En ese sentido, se crea la dirección general de relaciones con organismos electorales, cuando ya existía la coordinación de relaciones con organismos electorales, encargada del establecimiento y promoción de vínculos entre el tribunal electoral y los organismos electorales nacionales y extranjeros. También será dirección general la antigua coordinación de igualdad de derechos y paridad de género, que se encargará de promover la no discriminación e igualdad entre mujeres y hombres, principalmente en el ejercicio de derechos político-electorales.

Duarte expresó su preocupación de que estas nuevas direcciones provoquen incremento de personal y sueldos cuando ya existe una pesada nómina.

El problema no es una institución electoral, sino que todas las instancias federales y estatales pagan prestaciones elevadas y dan a sus funcionarios de alto nivel canonjías insostenibles, explicó el representante partidista.

Señaló que si no se bajan los sueldos y otras prestaciones, pero no 10 por ciento, porque es simbólico, las instituciones tendrán menor credibilidad y generarán una mayor cuota de desconfianza en la ciudadanía.