México negociará con Estados Unidos como lo que siempre ha sido y será, una nación plenamente soberana; con dignidad y sin miedo y no de manera sumisa o confrontándose, dijo ayer el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Videgaray Caso.

Ante la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, señaló que hay voces en el país que promueven una estrategia de conflicto, confrontación y hasta de insulto, mientras otras pronostican la sumisión vergonzosa. El gobierno mexicano no habrá de optar por ninguna de esas puertas falsas, sino como lo ha hecho a lo largo de su historia diplomática; con dignidad e inteligencia, abriendo las puertas del diálogo y la negociación para defender los intereses del país, apuntó.

Al inaugurar la 28 Reunión de Embajadores y Cónsules, puntualizó que la soberanía no se negocia, se ejerce con inteligencia y talento. Más adelante, expuso que se va a dialogar con Washington con una gran seguridad en nosotros mismos, sin miedo, sabedores de la importancia que tiene México para Estados Unidos en lo económico, político y social.

En el salón José María Morelos de la SRE, adonde llegaron embajadores y cónsules mexicanos, senadores, diputados e integrantes del cuerpo diplomático acreditado en el país, Videgaray Caso agregó que se negociará con sentido práctico, realismo y ambición, teniendo claros los objetivos y leyendo de manera correcta el mandato político que han dado los estadunidenses a su nuevo presidente.

Escuchará a miembros del SEM

Luego de comprometerse a escuchar a los integrantes del Servicio Exterior Mexicano (SEM), mantener una política de puertas abiertas hacia ellos y trabajar hombro con hombro, el ex secretario de Hacienda dijo que la llegada de Trump a la presidencia estadunidense ha abierto diversas incógnitas en el mundo, aunque en el caso de México estas son mayores.

En la primera jornada de la reunión, el funcionario se manifestó dispuesto a defender con energía, valor y vigor a los connacionales que viven en el país del norte y a los que habitan en México, pero dependen del Tratado de Libre Comercio. Habremos, continuó, de dejar en claro en las negociaciones, que los migrantes no son delincuentes, sino gente productiva.

A los cónsules y embajadores enviados a Estados Unidos, les pidió que sean una voz que transmita la importancia de la relación con México. Por otra parte, manifestó que hoy más que nunca el país tiene el imperativo de consolidar su liderazgo en América Latina, región con un gran potencial en materia comercial que hay que aprovechar.