La figura del vendedor ambulante será reconocida en la constitución de la Ciudad de México, documento en el que se asentó que como trabajadores no asalariados podrán ejercer su actividad en zonas especiales de comercio y cultura popular que definan las autoridades locales en coordinación con los integrantes de este mismo sector.

Lo que no prosperó en el pleno de la Asamblea Constituyente fue el planteamiento de crear un régimen de pensiones y ahorro para todos los que se dedican al comercio informal en esta capital, por lo que, al no alcanzar los votos de las dos terceras partes de los legisladores presentes, se regresó a la Comisión Carta de Derechos para que elabore otro dictamen.

La sesión de ayer se prolongó siete horas y media, tiempo en el que los constituyentes sacaron adelante los tres apartados, 24 numerales y 11 incisos del artículo 15, relativo a Ciudad Productiva, y sólo se votó en lo general el artículo 16, que se refiere a la Ciudad Incluyente.

Dentro del mismo artículo 15 –en el que se descartó por completo el reconocimiento al trabajo sexual, tal como planteaba el proyecto del jefe de Gobierno– se da rango constitucional al seguro de desempleo y se reconocen los trabajos doméstico y de cuidado de enfermos; además, se obliga a las autoridades locales a erradicar el trabajo infantil.