El 2017 será un año prolífico para el pugilismo femenil y para muestra de la apertura se realizará por primera vez una pelea de título mundial en Estados Unidos entre la mexicana Yazmín Rivas y la puertorriqueña Amanda Serrano.

Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), dio la primicia para la citada contienda, en la que se estrenará el cinturón diamante y estará de por medio la corona gallo de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), que expondrá la boricua.

El combate se realizará en Nueva York, el próximo 14, para abrir la cartelera del organismo sobre lo que tiene programado este año en mujeres y varones.

Respecto del pugilismo rosa, Sulaimán se frotaba las manos, acaso para estar a tono en el festejo del Día de Reyes, con el gran año que será para el CMB, tras ser relecto otro cuatrienio.

Aseguró que buscará que las mujeres tengan buena paga en sus presentaciones, aunque dudó que puedan estar a la altura de lo que reciben los hombres, porque eso a lo mejor se dará en el futuro y dependerá de sus representantes para organizar carteleras atractivas.

Sulaimán expuso que le interesa el resurgimiento del boxeo femenil estadunidense ante la atracción de las campeonas Christy Martin y Laila Ali, con peleas y técnica de alto nivel.

Consideró que México tiene representantes de buen calibre que llenarían arenas, y mencionó a “La Loba (Zulina Muñoz), La Roca (Ivette Zamora), Kika (Jessica Chávez), Barby (Mariana Juárez) y Tigre (Alejandra Jiménez)”, además de que está por integrarse la comisión femenil del CMB.

Interrogado sobre si el panorama del boxeo mexicano en EU cambiaría cuando asuma la presidencia Donald Trump, el dirigente del CMB dijo que una cosa era la política y otro lo deportivo, por lo que no sentía ninguna amenaza de un empresario que conoce desde que era promotor y aficionado del pugilismo, por lo que está convencido que continuará el apoyo de alguien a quien conoció hace años.

Otra de las peleas que podrían darse, aunque no se aventura a confirmarla, es la de Julio César Chávez Junior y Saúl Canelo Álvarez, lo cual sería un gran honor impulsar, pero hasta ahora no hay nada.

Ayer el Junior declaró a una televisora que “las negociaciones siguen en pie, pero no se ha tenido buena disposición del otro peleador, porque ha querido ganar cinco veces más que nosotros y se me hace injusto.

No deseamos más, estamos cediendo, pero que sea algo correcto, sobre todo porque es la pelea que la gente quiere ver. Y si no aceptan, pues no somos nosotros los que estamos interesados en el combate, es la gente. También está (el pleito) contra (Gennady) Golovkin.