Brasilia.

Al menos 60 personas murieron en un enfrentamiento entre grupos criminales en una cárcel de Manaos, conocida como el penal de Anísio Jobim, en la Amazonia brasileña, confirmaron este lunes las autoridades. El enfrentamiento entre pandillas comenzó la tarde del domingo y duró unas 17 horas, informó el secretario de Seguridad Pública del estado de Amazonas, Sérgio Fontes, en rueda de presa.

Algunos participantes en el enfrentamiento fueron decapitados y desmembrados. Se trata de la peor matanza en una prisión brasileña desde 1992. Fontes informó que un número no determinado de internos escapó durante la gresca y añadió que 40 fueron recapturados.

Los presos se enfrentaron con extrema violencia, indicó la Secretaría de Seguridad del Estado de Amazonas, cuya capital es Manaos.

También se informó que una docena de guardias de la prisión fueron tomados temporalmente en rehenes, pero ninguno resultó herido. El peor motín carcelario ocurrió en 1992 en la prisión de Carandiru, en Sao Paolo, y se saldó con la muerte de 111 reclusos.

Las autoridades dijeron que el motín y la subsecuente matanza surgieron de una violenta disputa entre dos de los grupos delictivos más grandes de Brasil por el control de varias prisiones. Se trata del Primer Comando de la Capital (PCC), originario de Sao Paulo, y el grupo local Familia del Norte (FDN).

Fontes agregó que los agentes encontraron un agujero en una pared a través del cual creen que se ingresaron armas al edificio, la policía encontró varias armas de fuego en la búsqueda posterior a los disturbios. El PCC es la banda de drogas y prisiones más poderosa en Brasil y ha estado tratando de extender su alcance a prisiones norteñas dominadas por la FDN.

El juez Valois explicó que durante las negociaciones los reclusos sólo pidieron no ser transferidos, quisieron asegurarse de que no fueran atacados por presos miembros de grupos adversarios y de mantener su derecho de recibir visitas.

Forte agregó que en otra cárcel de Amazonas 87 presos escaparon en las primeras horas de este lunes, y añadió que la policía local investiga si existe un vínculo entre el motín y la fuga.

Brasil tiene la cuarta mayor población penal del mundo, después de Estados Unidos, China y Rusia, de acuerdo con un estudio del Ministerio de Justicia; detalla que la mayoría de los presos son jóvenes negros. En el estado de Amazonas, con una población carcelaria superior a 8 mil 800, las cárceles albergan 2.59 presos por cada lugar disponible.