Aguarda a culminar con éxito pruebas requeridas por organismos reguladores: Granma
La isla gasta 2 mil millones de dólares anuales para importar 75% de los alimentos que requiere
Domingo 18 de diciembre de 2016, p. 18
La Habana.
Después de varios años de estudio y experimentación, Cuba cultivará maíz y soya transgénicos en gran escala en 2017 para disminuir su déficit alimentario, pero bajo estricto control científico y legal, anunció una fuente oficial.
De culminar con éxito todas las pruebas requeridas por los órganos reguladores cubanos, para la primavera del venidero año podríamos empezar la introducción de (transgénicos) en mayores extensiones de tierra
, dijo Mario Estrada, director de Investigaciones Agropecuarias del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB).
Cuba espera obtener resultados de forma segura y controlada
que disminuyan las importaciones de esos dos cereales, que en 2014 sumaron mas de 500 millones de dólares, dijo Estrada al diario oficial Granma.
La isla invierte cada año cerca de 2 mil millones de dólares en la importación de cerca de 75 por ciento de lo que comen los cubanos, pues sus producciones son insuficientes para alimentar a 11.2 millones de habitantes y casi 4 millones de turistas.
Las investigaciones sobre cultivos transgénicos, muy polémicos a nivel mundial, comenzaron en Cuba en 1996 y los primeros ensayos en pequeña escala se hicieron en 2009, luego de promulgarse la legislación regulatoria. Pero los resultados no se ajustaron a las expectativas y ello determinó la interrupción de las pruebas de campo con fines productivos
, agregó Estrada.
En la actualidad trabajamos en la obtención de nuevas líneas híbridas transgénicas de maíz, que en escala de pequeña parcela experimental, muestran rendimientos potenciales de nueve toneladas por hectárea (ton/ha), bien cerca de los niveles alcanzados por los países líderes mundiales en esta producción
, resaltó.
Igualmente se experimentó con una soya transgénica resistente también a herbicidas, que en áreas experimentales de la empresa Cubasoy mostró un rendimiento de hasta 2.8 ton/ha, muy superior a los habituales alcanzados allí
, explicó.
Granma enfatizó que buena parte de los criterios opuestos a los organismos genéticamente modificados se sustentan en experiencias referidas al mal uso de las indicaciones tecnológicas, la falta de información, deficiente capacitación y las prácticas abusivas de determinadas empresas productoras de semillas a escala mundial
, lo cual no sería el caso cubano.