Los programas sociales de combate a la pobreza no sólo no han dado resultados para reducir las necesidades de los sectores con mayores carencias, sino que en entidades como el estado de México son usados como una herramienta electoral del Partido Revolucionario Institucional (PRI), denunció Antonio Lara, director del Comité de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero.

Desde principios del siglo pasado se lucra con la pobreza de la gente y de los pueblos del estado de México y en esto el PRI es un experto. En la antesala del proceso para renovar la gubernatura en 2017 hemos notado un uso indebido de recursos públicos, señaló el activista.

Según Lara, la Secretaría de Desarrollo Social ya ha comenzado a despilfarrar recursos públicos para inducir el voto de los mexiquenses, sobre todo en comunidades indígenas y pobres cercanas a la ciudad de Toluca.

Encabezados por el secretario Luis Miranda, las huestes del PRI están tratando de controlar el voto mexiquense para tratar de asegurarse la gubernatura del estado y creo que sí están logrando mantener el voto corporativo, lamentó.

Lara consideró que los programas sociales de combate a la pobreza en realidad no buscan terminar con este fenómeno, sino simple y sencillamente administrarlo, dosificarlo y capitalizarlo para fines electorales.

Administra la pobreza al simular que existe una política de desarrollo nacional, cuando en realidad está pensando sólo en beneficio de los intereses de las empresas y las grandes trasnacionales. Tienen que dar algunos recursos para que la inconformidad no llegue a tonos de rebelión, pero sólo los usan para perpetuarse en el poder, subrayó.