La ONU exige a Al Assad auxiliar a civiles
Miércoles 14 de diciembre de 2016, p. 28
Nueva York.
La resistencia rebelde en la norteña ciudad siria de Alepo concluyó este martes, tras años de combates y meses de un duro cerco y bombardeos que culminaron con el sangriento colapso de sus defensas esta semana, lo que obligó a los insurgentes a aceptar una tregua para retirarse.
El embajador ruso ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Vitali Churkin, confirmó el fin de los combates en el este de Alepo, así como un acuerdo con el gobierno de Bashar Al Assad para permitir la salida de los civiles y de los últimos combatientes rebeldes de la ciudad.
Tras una sesión en el Consejo de Seguridad, Churkin precisó que el gobierno de Siria restableció el control
en esa disputada parte de la ciudad. La última información que tengo es que ciertamente se alcanzó un acuerdo en el terreno para que los combatientes puedan salir
, explicó.
Los rebeldes comenzaron a salir y después cesaron las operaciones militares; los combatientes y los miembros de sus familias, así como los heridos, pasan actualmente por corredores en dirección a los lugares que eligieron, entre ellos Idleb
.
El acuerdo, que fue facilitado por Rusia y Turquía, que apoyan al gobierno de Al Assad y a la oposición, respectivamente, fue anunciado originalmente por facciones de los milicianos rebeldes agrupadas en el llamado Ejército para la Liberación de Siria.
Una fuente del gobierno sirio señaló que el ejército podría declarar la ciudad bajo control total este miércoles o jueves, mientras seguidores de Al Assad celebraban en las calles la inminente victoria sobre los insurgentes.
A mediados de noviembre el ejército sirio y aliados lanzaron una ofensiva contra la zona este de la ciudad, bajo control rebelde. Con intenso fuego de artillería y la ayuda de bombardeos rusos, las tropas oficiales consiguieron reconquistar la zona.
La embajadora estadunidense ante la ONU, Samantha Power, pidió en la reunión del Consejo de Seguridad el envío de observadores internacionales a Alepo para supervisar la salida de civiles tras informes de ejecuciones durante los registros casa por casa.
El organismo internacional hizo pública su preocupación por reportes de que en el este de Alepo soldados sirios y combatientes iraquíes aliados ejecutaron de forma sumaria a 82 personas, entre ellas 11 mujeres y 13 niños.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, exigió a Damasco y sus aliados (Rusia e Irán) permitir la salida del área a los civiles y suministrarles ayuda.