Taxistas bloquearon varias horas vialidades primarias de la Ciudad de México para exigir la salida de las empresas privadas de transportación de pasajeros, como Uber y Cabify; que la Secretaría de Movilidad entregue un informe de las reglas de operación, tarifas y aportaciones que éstas han realizado, y que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declare inconstitucional la prestación de ese servicio.

En conferencia de prensa, realizada frente al Antiguo Palacio del Ayuntamiento, denunciaron que por medio de la entrega gratuita de tablets a los taxistas concesionados para que apliquen sus cobros, en lugar de usar el táximetro, la Semovi beneficia a la empresa Car Record Technology (Carter), pues las ganancias de la publicidad que contendrán irá directo a la empresa, no al taxista.

A ello se suma el cobro en efectivo del servicio por las empresas trasnacionales, que significa una competencia desleal, cuando las autoridades dieron a conocer que únicamente estaban autorizadas a atender a los usuarios con tarjeta de crédito y/o débito, lo cual atenta también contra nuestro empleo y el bolsillo de la gente, porque cobran más caro.

Ignacio Rodríguez, vocero del Frente de Taxistas Concesionados Organizados de México, señaló que por la cerrazón de las autoridades bloquearon el Eje Central y Poniente 112, Insurgentes y Ticomán, Acueducto de Guadalupe e Insurgentes, Tlalpan y Circuito Interior, Paseo de la Reforma, a la altura de Chivatito, y la calzada Ignacio Zaragoza.

Protestas simultáneas

En la avenida Insurgentes, a la altura de Acueducto de Guadalupe, en las inmediaciones de Indios Verdes, más de 150 granaderos de la policía capitalina replegaron a los taxistas que durante horas bloquearon esta vialidad, lo que generó caos vehicular.

De manera simultánea, en el estado de México, más de mil taxistas concesionados de 10 organizaciones realizaron cuatro bloqueos en los municipios de Ecatepec y Nezahualcóyotl, en las vías López Portillo y Morelos, así como en avenida Central, para exigir a las autoridades la salida de las unidades de Uber. Los taxistas permanecieron más de cinco horas, lo que dejó varados a miles de automovilistas, sobre todo en las entradas a la Ciudad de México.

Un bloqueo fue en la vía José López Portillo, en su entronque con las avenidas 30-30 e Insurgentes, en Ecatepec, donde impidieron el paso de automovilistas procedentes de Coacalco y Tultitlán.

Otro se realizó en la vía Morelos, a la altura de Santa Clara, en dirección hacia la Ciudad de México. Dos retenes más fueron sobre avenida Central, a la altura del centro comercial Las Américas, en Ecatepec, y frente a la estación Nezahualcóyotl del Metro. Los taxistas, asimismo tomaron las instalaciones regionales de Uber en Nezahualcóyotl y pintaron leyendas en su fachada.