BBVA Bancomer consideró que sería irresponsable aplicar un parón de crédito ante la expectativa en un cambio de condiciones económicas por la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.

Es irresponsable hacer un parón de crédito cuando no sabemos cómo vienen las cosas, consideró Eduardo Osuna, director general de BBVA Bancomer, La banca va a ser prudente en la toma de decisiones en el nuevo entorno planteado por la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, afirmó.

En los siguientes meses, de aquí hacia finales de abril –cuando se cumplan los primeros 100 días del nuevo gobierno estadunidense, que inicia el 20 de enero–, lo que se puede esperar es que haya un retraso en la inversión en el país, mientras la incertidumbre se va disipando en función de las acciones concretas que se tomen en Washington. En función de eso, tomaremos las decisiones que haya que ejecutar, de manera responsable, apuntó. Se tiene que ir trabajando con datos duros y reales para tomar las decisiones correctas de lo que viene, dijo.

El presupuesto de otorgamiento de crédito de Bancomer no se ha modificado a raíz del resultado electoral en Estados Unidos; si es el caso, será adecuado conforme vayan ocurriendo las cosas.

Lo que sí sabemos que va a ocurrir en estos cinco meses de incertidumbre es que tenemos que estar listos para apoyar a las pequeñas y medianas empresas que tengan un cambio de condiciones, planteó.

Uso de datos sobre transacciones

La información arrojada por los datos de cada persona que utiliza una tarjeta de crédito o débito en centros turísticos ahora podrá ser utilizada para el diseño de políticas de desarrollo de una actividad que aporta 8.5 de cada 100 pesos que genera la economía mexicana, como resultado de un convenio entre BBVA Bancomer y la Secretaría de Turismo.

El proyecto se desarrolló, a partir de que fue firmado el convenio en octubre del año pasado, en los principales puntos turísticos de Quintana Roo y en los llamados pueblos mágicos. Consiste en recolectar enormes volúmenes de datos sobre pagos hechos con tarjetas de crédito y débito.

Los datos permiten saber cuánto gasta una persona, número de veces que usa el plástico, el género, poder adquisitivo, ciudad e incluso calle de origen, explicó Hugo Nájera, director general de desarrollo de negocios de BBVA Bancomer.

La institución hace públicos todos esos datos, recopilados con normas de seguridad que hacen imposible la identificación del dueño de los plásticos, dijo Nájera. En primera instancia, los datos fueron compartidos con la Secretaría de Turismo para que se vuelvan un insumo en el diseño de las políticas de desarrollo y promoción de esta actividad, que aporta 8.5 por ciento del producto interno bruto (PIB).

Tenemos toda la información de las transacciones en el país, dijo en una conferencia de prensa este martes. El uso de estos grandes volúmenes de datos, conocidos como big data, permite entender las pautas de comportamiento de los turistas. Esos datos se pueden convertir en conocimiento para tomar decisiones, productos o rutas turísticas, expuso.