De 2010 a 2016 aumentaron en más de mil por ciento las denuncias interpuestas por el delito de tortura cometido por funcionarios públicos de esta capital.

Datos oficiales de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) local indican que en 2010 se iniciaron 40 querellas por ese ilícito, y para 2016 la cifra se elevó a 488.

Esta información fue proporcionada por la dependencia en respuesta a una solicitud de un particular, quien pidió, entre otros aspectos, conocer las dependencias con el mayor número de denuncias de ese tipo, los casos ya concluidos y el sentido que tuvieron, además de los cargos de los funcionarios señalados. Sin embargo, entregó datos parciales.

Ante esta situación, el solicitante presentó un recurso de revisión ante el Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales, cuyo pleno abordó ayer el asunto.

Ahí se detalló que la PGJ proporcionó una tabla con datos sobre el delito de tortura, los cuales muestran que no sólo en esos seis años se acumularon mil 217 denuncias por ese delito, sino que además aumentaron. Respecto de las denuncias por tortura pendientes de resolver, la PGJ informó que son 541.