El presidente Enrique Peña Nieto acudirá hoy a los funerales y homenaje del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro, fallecido el viernes pasado a los 90 años. La presencia del mandatario mexicano –que asistirá acompañado por la canciller, Claudia Ruiz Massieu– patentiza la histórica buena relación que han sostenida ambas naciones, incluso en los momentos de tensión, en los albores de la revolución, y sólo con la excepción de los dos gobiernos de extracción panista.

Peña Nieto saldrá a La Habana poco después del mediodía y se estima que retornará esta misma noche. Será la tercera ocasión que acudirá a la isla. En la primera visita, en ocasión de la Cumbre de Estados Latinoamericanos y del Caribe de enero de 2014, el Presidente mexicano fue de los pocos líderes latinoamericanos que se reunieron en privado con el comandante Fidel Castro en su residencia privada en La Habana.

Al justificar el viaje, el embajador de México en Cuba, Enrique Martínez y Martínez, sostuvo que es palpable el impacto que ha tenido el deceso del líder revolucionario en el pueblo cubano, el cual manifiesta profunda tristeza; se puede palpar el sentimiento general que vive la gente.

Para el diplomático se tiene que estar aquí para ver que la isla está en periodo de duelo; se siente un vacío, un hueco muy grande que está dejando el comandante en jefe de la Revolución Cubana en la población, que aunque polémico, sin duda es un ciudadano universal que hizo historia, un personaje que dejó huella profunda en su paso por la vida y luchó contra viento y marea defendiendo sus principios.

El mundo, aseveró, le reconoce la tenacidad en sus principios y que, independientemente de los problemas económicos de Cuba, deja un país con altos niveles de seguridad, educación, y salud, donde no hay contaminación, ni siquiera visual, pues los anuncios son los valores que deben regir a los cubanos.

Ese país, dijo, ha tenido mucha cercanía con México, así como una relación económica, histórica y cultural intensa; un Golfo de México que no nos separa, sino nos une, así como intereses en común.

En los primeros minutos del sábado, cuando trascendió la noticia del deceso del legendario líder cubano, Peña Nieto emitió sus condolencias al pueblo y gobierno de la isla en su cuenta de Twitter: Lamento el fallecimiento de Fidel Castro Ruz, líder de la Revolución Cubana y refrente emblemático del siglo XX, y agregó un segundo mensaje: Fidel Castro fue un amigo de México, promotor de una relación bilateral basada en el respeto, el diálogo y la solidaridad.

Este mensaje contrasta con el difundido por el ex presidente Felipe Calderón, que refleja las motivaciones de la inestable relación con Cuba en ese periodo: Cuando nací, Fidel Castro ya era dictador en Cuba. Fui presidente de México y seguía siéndolo. Ojalá llegue pronto la libertad para los cubanos.

Al anunciar oficialmente el viaje, la Secretaría de Relaciones Exteriores señaló que la presencia del presidente Enrique Peña Nieto en la ceremonia es reflejo del aprecio del pueblo mexicano hacia el pueblo cubano y del excelente nivel en que se encuentra la relación entre ambos países. Es, asimismo, una muestra del reconocimiento de México al comandante Fidel Castro, que siempre fue amigo de México y promotor de una relación bilateral basada en el respeto, el diálogo y la solidaridad.

Por otra parte, en la embajada de Cuba en México el libro de condolencias está abierto desde ayer y hasta el 4 de diciembre.