En el bienio reciente, México poco ha cambiado en cuanto al ejercicio de la libertad religiosa, y las perspectivas en torno al tema no son alentadoras, señala el informe Libertad religiosa en el mundo 2016.

Añade que el clima, algunas veces adverso, para ejercer este derecho a cabalidad preocupa, y destaca que la situación se encuentra inmersa en un ambiente de graves problemas sociales que convergen, entre ellos desigualdad social y pobreza, además de que el país está acosado por la corrupción, las drogas, la violencia y la migración indocumentada hacia Estados Unidos.

El reporte, elaborado por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, refiere que en ese panorama de violencia generalizada la libertad religiosa también se ve afectada y destaca que ha habido diversos ataques, secuestros y asesinatos de integrantes del clero. Alude que en América Latina el país ostenta el récord de ataques a sacerdotes.

Indica que aunque gran parte de las víctimas son católicas, integrantes de otros grupos religiosos han padecido abusos, acoso y presiones para renegar de su credo, como ocurre en el sureste contra algunas comunidades evangélicas, según han documentado grupos de esa fe. Ante estas situaciones, señala, la Conferencia del Episcopado Mexicano ha hecho llamados al diálogo y a la concordia.

De acuerdo con el diganóstico, México no se encuentra entre los países con mayor ataques a la libertad religiosa y los casos más emblemáticos están en Africa y Asia; 38 países de esos continentes sufren las peores condiciones de discriminación y persecución. Los atacantes son integrantes de grupos radicales islámicos, estados autoritarios y nacionalismos y otros grupos fundamentalistas.

Según el reporte, la persecución religiosa en México es estable. Al hacer un recuento de los lineamientos legales a los que están obligadas las asociaciones religiosas, subraya que los ministros de culto no pueden ser candidatos en una elección popular y existen sanciones para éstos o los grupos religiosos que se opongan a las leyes nacionales u ofendan los símbolos patrios.